El terremoto que ocurrió el día de ayer en Artemisa de 5.3 grados dejó además de algunas daños físicos, la preocupación de los habitantes de la zona quienes han contado su experiencia sobre ese momento.
En las siguientes horas del sismo que sacudió fuertemente el territorio, los cubanos quedaron atemorizados ante la posibilidad de que se repita un evento como este.
Una cubana contó a Juventud Rebelde que estaba dormida y se despertó porque se golpeó la cabeza con el espaldar de la cama, ante el fuerte movimiento, en ese mismo momento, cuando abrió los ojos, todo a su alrededor vibraba fuertemente a causa del terremoto.
“La casa se movió completa para adelante y luego para atrás. Los cubos llenos de agua de momento se habían botado”, contó una cubana llamada Johanna, que estaba con su hija viendo televisión.
Fueron muchos los cubanos que salieron a las calles y hasta lloraron del susto ante el terremoto, otros perdieron algunos bienes de vidrio, como fue el caso de la señora Caridad, que perdió el juego de tasas de café que más atesoraba y tenía encima de la nevera.
“No es la primera vez que se siente en el municipio de San Cristóbal un evento de este tipo. En enero de 1880 ocurrió un terremoto de gran magnitud (6.0 en la escala de Richter) que tuvo el epicentro ahí y su onda expansiva se sintió en la Isla de la Juventud, y en Cayo Hueso, Florida, EE.UU.”, expresó el meteorólogo Jorge Félix Hernández Capote.
El temblor se registró el pasado martes a las 11 de la mañana, y tuvo una magnitud de 5.1 en la escala de Ritcher, se sintió especialmente en la zona del Mariel, Bahía Honda, Candelaria, Artemisa y San Cristóbal. Además dejó daños en la infraestructura del Hospital General Docente Comandante Pinares, donde tuvieron que trasladar a los pacientes, ante las afectaciones que sufrieron las paredes y ventanas del hospital.
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Redacción Cubanos por el Mundo
