A través de un video al que tuvo acceso Cubanos por el Mundo, un isleño que permanece en un centro de aislamiento denunció las deplorables condiciones que padecen quienes están internados en contra de su voluntad. En su grabación, el ciudadano expone que están totalmente descuidados por las autoridades castristas, conviviendo personas que dieron positivo a la COVID-19 con quienes apenas esperan los resultados de la PCR.
Además aclaró que, en su caso, lleva una semana en el centro de la Universidad de Oriente, en la provincia de Santiago de Cuba. Sin atención médica e implementos para garantizar tan siquiera la higiene de las instalaciones
“Estas personas que estamos acá estamos positivos desde el martes y estamos tirados aquí en el centro de aislamiento de la Universidad de Oriente. Nosotros estamos aquí solos, no hay médicos, no hay cloro no hay nada”
sostuvo el isleño en el audiovisual
Sin medicamentos, cubanos en centro de aislamiento de la Universidad de Oriente solo cuentan con su nasobuco
Con el nasobuco como único escudo para la mortal enfermedad, los ciudadanos que permanecen en el centro de aislamiento de la Universidad de Oriente no reciben ni medicamentos al ser diagnosticados con COVID-19. “Aquí nadie es gusano. Lo que queremos es que el mundo sepa lo que está pasando. Aquí no hay un médico, no hay nada”, recalcó el denunciante.
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Según las declaraciones del cubano, que prefirió mantenerse en el anonimato para evitar represalias de la dictadura, en el recinto conviven 56 personas positivas a la COVID-19 con otras que pudieran no haber llegado contagiadas cuando fueron “aislados”.
Las imágenes filmadas por el isleño confirman los reclamos realizados a través del video. Personas amontonadas en los pasillos y cero supervisión médica.
Entre las denuncias, alertó que a los pacientes positivos no se les ha suministrado el tratamiento correspondiente, para luego justificarse con que patologías como “hipertensión” o “diabetes” provocaron un desenlace fatal; mientras realmente eran ignorados en el centro de aislamiento.
“Temo por mi salud, porque yo sí soy hipertenso”, finalizó.
Redacción Cubanos por el Mundo
