Un grupo de exiliados cubanos en España denunciaron el drama, el terror y las penurias que enfrentan sus familiares en la isla producto de los más de 60 años de “revolución” castrista.
Lorenzo Mireles, un exiliado cubano residente en Madrid, España, mostró su preocupación por la represión violenta ejercida por las autoridades del régimen de Díaz-Canel contra los manifestantes que desde el pasado domingo 11 de julio se tomaron las calles reclamando la libertad de Cuba.
Mireles quien también preside la asociación Acciones por la Democracia dijo a Libre Mercado que, los protestantes en la isla “ya no tienen nada que perder” porque ya están cansados de mal vivir en la isla cárcel en donde la electricidad ha subido tanto que, “gran parte del país está a oscuras porque no pueden pagarla”.
“Medio kilo de carne de cerdo cuesta el salario de un camarero al mes, 5 euros; una barra de pan, cuando hay, casi 1 euro; unos zapatos, unos 60 euros; un pantalón no puedes encontrarlo por menos de 50 euros, ¿así quién puede comer o vestirse?”, explicó el exiliado cubano.
Exiliada cubana con 32 años ya ha vivido los estragos del sistema comunista
Por otra parte, Yanelis Núñez Leiva, otra exiliada cubana que desde hace dos años reside en Madrid contó que, a sus cortos 32 años ya ha vivido lo que ocasiona el sistema comunista en una nación como Cuba, en donde el régimen del puesto a dedo Miguel Díaz-Canel ahoga económicamente a sus familiares y amigos.
Núñez habló sobre la odisea que enfrentan los ciudadanos de a pie para poder conseguir un poco de comida.
“Si quieres comprar pollo tiene que ser en tu mercado, en las tiendas de tu domicilio, no puedes ir a otras. Las tiendas que venden en peso cubano están desabastecidas. El Gobierno cubano obliga ahora a comprar con unas tarjetas magnéticas que tienen que recargarse desde el exterior, en el extranjero. Obligan a los familiares que están fuera del país a que recarguen las tarjetas del Gobierno si quieren que su familia coma. Es terrible. Así controlan todo el dinero, hasta el que viene de fuera. Además, no todos los cubanos reciben remesas mensuales de sus familiares. Los que no lo reciben no comen”, explicó Yanelis.
Yanelis Núñez Leiva habló sobre el desabastecimiento de alimentos que enfrenta la sociedad cubana ya que, en Cuba escasea el aceite, el ron, el pollo, los huevos, los cigarros y hasta las verduras. “Es que no hay de nada. Aunque tengas dinero para comprar no se puede comprar más de un producto”.
Exiliados cubanos afirman que la dieta de un cubano está basada en arroz con frijoles
Estos exiliados cubanos indicaron que, la dieta de un cubano dentro de la isla está basada en arroz y frijoles la mayor parte del tiempo. “Es imposible comer otra cosa”.
“La carne de cerdo subió muchísimo y ahora ya es un lujo. La gente come algunos embutidos hechos con los restos de animales que sobran. Lo muelen y hacen picadillo de pavo, pero es de una calidad malísima. Además, la carne de res ha estado prohibida desde hace 60 años. Ahora estos meses, el Gobierno ya ha permitido vender carne de ternera porque no hay nada de alimentos, no le ha quedado otra. Antes la carne de ganado estaba prohibida. Te metían preso si matabas a una vaca porque, aunque fueran de un ganadero, pertenecían al Gobierno y tenía contadas las cabezas de ganado”, dice Yanelis.
En cuanto a esto, Rigoberto Carceller, exiliado cubano en España desde los años 90 y actual propietario de una vinoteca y restaurante en Madrid comentó que, “La gente ha intentado escapar de la pena de cárcel por matar a una cabeza de ganado”.
“Hay malnutrición y muchísimas personas que se han quedado ciegas por este motivo. Es el miserable el que está en la calle, no tienen nada que perder. La vida es tan obstinada en Cuba, la vida es tan miserable que es preferible que te maten”, asevera.
“El pueblo está totalmente amordazado, vigilado, machacado”.
“El pueblo está totalmente amordazado, vigilado, machacado. Los cubanos no se han podido rebelar porque la maquinaria de represión estaba muy bien preparada. Perdías tu trabajo si te rebelabas, perdías a tus familiares incluso. Pero ya da igual, se ha llegado al límite. En Cuba la gente no puede ni vestirse, está sin ropa, descalza prácticamente, con lo mismo puesto todos los días”, precisó Rigoberto Carceller.
En cuanto al sistema de transporte, Yanelis Núñez indicó que, “Todos son coches heredados de los años 50. Entraron ahora vehículos nuevos pero el Gobierno lo vende al triple de lo que se vendería en Europa. Nadie puede permitírselo”.
Estos cubanos en el exilio concuerdan en que la única forma de sobrevivir en Cuba es con el envío de dinero de familiares en el extranjero.
“Los cubanos sobreviven a nivel del milagro. La gente está en la calle porque van a morir de hambre igualmente. Nunca preguntes a una ama de casa cómo van a comer al día siguiente, porque no lo saben”, aseguró.
Redacción de Cubanos por el Mundo.
