El ajedrecista cubano Arián González, quien fue detenido y posteriormente liberado durante las protestas en Cuba, relató como fue su paso por la cárcel castrista, detallando que se encuentra “horrorizado y en shock”, además de haber recibido “presión psicológica” por parte de agentes de la Seguridad del Estado.
González de 32 años, sostuvo una huelga de hambre ya que consideraba injusto su arresto, pues solo levantó su voz en contra de toda la injusticia que se vive en Cuba. Ya ha vuelto a ingerir alimentos y está en su casa, aunque bajo vigilancia de los esbirros comunistas
El ajedrecista cubano estuvo encarcelado en la prisión La Pendiente de Villa Clara, bajo el supuesto cargo de “desacato”, una figura jurídica que el régimen comunista usa para encarcelar a los disidentes y personas que se atreven a criticarlo.
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Arián González, que reside en Orense, España, pero viajó a Cuba a principios de julio para cuidar a su madre diabética. Recuerda que en cualquier momento, el régimen castrista puede enviarlo nuevamente a la cárcel, además de no poder regresar a España.
La Ley cubana no reconoce la doble nacionalidad a los nacidos en la isla, que a todos los efectos son considerados únicamente cubanos dentro de su territorio.
A falta de datos oficiales, activistas han documentado más de 500 detenidos desde el 11 de julio, entre ellos varios menores de edad; mientras, organizaciones religiosas asisten a familiares de los arrestados y salen a la luz duros testimonios de personas liberadas los pasados días.
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Por otro lado, el régimen niega la existencia de desaparecidos y ha desestimado las listas elaboradas por activistas independientes que circulan en redes sociales con los nombres de personas que se desconoce su paradero.
Redacción Cubanos por el Mundo
