La madre cubana Esperanza Silvia Pérez Peña, calificó como una farsa, el juicio que la dictadura hizo en contra de su hijo Nemed Ramón Álvarez Pérez detenido tras las protestas del 11 de julio.
La cubana afirmó que a los detenidos los acusaron sin pruebas, hasta 10 meses de cárcel, en el caso de su hijo fueron ocho meses, sin tener ningún delito demostrado.
La madre del joven le contó a Cubanet, que las 11 personas que fueron enjuiciadas, ya estaban sancionados, incluso antes de que comenzara el procedimiento.
“Eran 10 jóvenes los que estaban allí y una persona adulta de unos 60 años (…). Estaban sancionados antes de llegar a ese juicio. El testigo era un jefe de Sector de Centro Habana que, sin mirar a los que estaban allí, decía: ‘Sí, ellos son cabecillas’. Era un disco rayado repitiendo aquella frase”, contó.
La señora Esperanza denunció que a ella le avisaron un día antes del juicio de su hijo, diciéndole que solo podía asistir una persona y que podía llevar a un abogado, pero no era necesario.
La cubana aseguró que ese día que pudo ver a su hijo, se dio cuenta que tenía unas marcas en los ojos porque había sido golpeado.
“Todos los muchachos estuvieron muy bien defendidos por aquellos abogados, pero yo que soy casi analfabeta (…) me di cuenta que lo que dijeran los abogados no tenía valor ninguno”, denunció.
La cubana contó cómo ocurrieron los hechos el pasado 11 de julio en el momento en el que la policía los reprimió e incluso ella fue golpeada.
El régimen castrista utiliza la represión como su única herramienta para callar a los cubanos cada vez que intentan expresarse en su contra y reclamar sus derechos.
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Redacción Cubanos por el Mundo
