Casi partido a la mitad y a escasos centímetros de ocasionar una tragedia. La inminente caída de un edificio en La Habana está a punto de ocurrir, según denunciaron usuarios en redes sociales.
A través de fotografías compartidas en la red social Facebook por un usuario identificado como Dariel Rey, se puede apreciar cómo la estructura, ubicada en Habana Vieja, está a punto de venirse abajo.
“Esto es Gloría y Factoría, Habana Vieja, un derrumbe que ya no es potencial, es inminente, y no tiene un puntal, una señalización, solo un cartel a lápiz hecho por los vecinos”, escribe el usuario.
Una gran brecha que solamente se ignora si se quiere, ya que este edificio en La Habana evidencia a leguas un peligro para muchas personas, muchas familias… pero el régimen, como de costumbre, prefiere hacer caso omiso y demostrar falso interés una vez ocurren las tragedias.
“Lo peor es la naturalidad con que vamos asumiendo esta conviencia con la muerte, como si fuera un vecino más en la cola de la bodega”.
El abandono que se aprecia en las calles de Cuba es desgarrador: edificios a punto de caer, calles completamente dañadas, casas destruidas, hospitales llenos de basura, miseria y más miseria, todo ello producto de las desvergonzadas acciones de la tiranía desde hace más de 60 años.
Son los cubanos los que deben pagar los platos rotos de las irregularidades del régimen, pero lo peor de todo, es que casi siempre lo pagan con sus propias vidas; vidas inocentes que no merecían pasar por eso.
Derrumbes en La Habana
Los derrumbes en La Habana son, lamentablemente, cosas que pueden ocurrir en cualquier momento.
Hace un mes, se registró un derrumbe parcial en la capital cubana, poniendo en peligro la vida de muchas personas. No obstante, las autoridades cubanas, poniendo por delante su crueldad, decidieron limpiar en primer lugar los escombros antes de evacuar a los afectados, todo para que las cámaras no captaran el desastre.
Es importante acotar que, los cubanos están prácticamente obligados a vivir en estas zonas de riesgo por dos razones: la primera, pedir permiso a las autoridades para hacer la remodelación y, la segunda, obtener los materiales de construcción, hoy en día una labor titánica, por no decir imposible.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
