Evelin González Soler, hija del activista miembro de la Alianza Democrática Oriental y ahora preso político Eldris González Pozo, expresó sentir miedo de que su padre muera en prisión “y después me digan que falleció de COVID-19”.
Cabe destacar que, Eldris González Pozo se encuentra en la prisión de mediana seguridad La Caoba en Santiago de Cuba, cumpliendo una condena de tres años y 10 meses.
Evelin de tan solo 15 años de edad, se encuentra profundamente preocupada por la situación actual de su padre en la cárcel antes mencionada ya que, no tiene los medicamente necesarios para tratar la enfermedad reumatológica que padece.
“La salud de mi padre en estos momentos es preocupante por la carencia de medicamentos que hay en la cárcel. Necesita el metotrexato para tratar la espondilitis anquilosante que padece, así como diclofenaco vitaminado para los dolores”, dijo la adolescente a CubaNet.
Eldris González actualmente cuenta con una prótesis de cadera, debido a que la enfermedad reumática que padece afecta los huesos y las articulaciones, principalmente a la columna vertebral.
El preso político Eldris González necesita otra intervención quirúrgica
Hay que me mencionar que, el preso político debe ser intervenido nuevamente para colocarle otra prótesis de cadera en la parte derecha.
Según la información suministrada por la menor, a González en la prisión no le pueden garantizar los medicamentos necesarios para hacer de su vida un poco menos dolorosa.
“En la prisión no le pueden garantizar medicamentos ni para la presión. A mi papá su enfermedad le limita agacharse y correr; y los dolores propios de su padecimiento les son insoportables. Tengo miedo que se muera allí de tanto dolor”, afirmó Evelin.
Eldris González Pozo quien trabajaba de manera particular en Santiago de Cuba fue sentenciado por los supuestos delitos de atentado, desacato y desobediencia, tras denunciar que, la Seguridad del Estado había cerrado su negocio para “asfixiarlo económicamente”.
“Una de las oficiales a cargo del caso dice que mi papá es culpable, pero sé que no es así porque el día que sucedieron los supuestos hechos por los que lo acusan yo estaba ahí. Mi papá no empujó a nadie, cerró la compuerta de su negocio y los policías eran los que le decían a la inspectora que dijera esto o aquello”, precisó la joven.
Redacción de Cubanos por el Mundo.
