El cruel aparato de injusticia del régimen, no conforme con reprimir arbitrariamente a los cubanos, ahora pretende sentenciarlos a muchos años de prisión. Esto le está sucediendo a Samuel Pupo Martínez, de 47 años, quien fue secuestrado por esbirros castrista tras haber participado en las históricas protestas del 11J, y ahora quieren encerrarlo por 18 años.
Así lo denunciaron a través de las redes sociales, donde dieron a conocer que su esposa recibió la notificación de la posible condena y, para colmo, al hombre lo están acusando de ser el líder de las protestas en Cárdenas, Matanzas.
“La instructora del caso le dijo a su esposa que pueden imponerle una condena de 18 años de prisión. Lo están queriendo acusar de ser el líder de las protestas en Cárdenas, cuando lo único que hizo fue unirse a los manifestantes y gritar Libertad, Patria y Vida”,
señala la denuncia en Facebook.
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De igual forma, informaron que actualmente Samuel Pupo se encuentra recluido en la prisión de máxima seguridad “Agüica” de la provincia matancera.
Y es que a estas alturas, tales acciones ya no causan tanta sorpresa, sino más bien indignación. En Cuba, manifestarse pacíficamente por no estar de acuerdo con las absurdas e insólitas acciones de la tiranía, es castigado con brutales golpizas, hostigamientos, amenazas, prisiones domiciliarias, y hasta mucho tiempo en la cárcel, como puede sucederle a este cubano.
Mientras tanto, la mayor de las Antillas llora cada día la miseria que tiene aguantar su pueblo, como por ejemplo el sufrimiento para conseguir medicinas o comida, para ser atendido dignamente en un hospital, o hasta para pedir por una ambulancia, que hoy en día brillan por su ausencia.
Cuba se cae a pedazos, y el régimen lo único que hace es elevar las penurias de sus habitantes.
Redacción de Cubanos por el Mundo