El camionero cubano Rogel Aguilera-Mederos, a quien señalan del mortal accidente en la autopista I-70 en Colorado que dejó cuatro muertos y más de 10 heridos, pidió perdón a los familiares de las víctimas, asegurando que él es una víctima más del siniestro.
Desde la cárcel del condado de Jefferson en Colorado, el camionero cubano aseguró que lo ocurrido no fue intencional y detalla que levanta su voz para pedir perdón. “Quiero que Dios haga el milagro y toque su corazón”, dice el antillano entre lágrimas a Telemundo 51.
Asegura que un milagro para él sería darles un abrazo a las familias de las víctimas y decirle cara a cara lo que siente.
“Quisiera hablar con ellos cara a cara para decirles que lo siento, que me perdonen, que no fue intencional, que yo prefería haberme muerto, que yo nunca me fui arriba del tráfico, nunca, nunca y todos los días le pregunto a Dios por qué me dejó vivo, yo cambiaría mi vida por la de los cuatro”.
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Algunos testigos afirman que en la interestatal-70 existe una rampa de desaceleración para casos como estos, pero el camionero cubano detalla que nunca vio dicha rampa. “No la vi, eso es un momento difícil de explicar por mucha experiencia que tengan”.
El camionero cubano, quien reside en Texas, fue declarado culpable de un total de 26 de los 41 cargos que enfrentaba inicialmente, incluyendo cuatro cargos de homicidio vehicular.
El joven asegura que él revisó el camión, como de costumbre, pero que sería la primera vez que manejaba un camión fuera de Texas.
Aguilera será retenido por las autoridades hasta el día 13 de diciembre a las 1:30 p.m., cuando regrese a la corte para recibir sentencia.
Redacción Cubanos por el Mundo
