El premio para la cara más dura de este 2021 sin duda es para Miguel Díaz-Canel, el mandamás cubano, quien aseguró que en Cuba no existe una dictadura cruel, sanguinaria y criminal, mientras varios jóvenes están siendo procesados por la (in) justicia cubana tras simplemente, haber salido a protestar el pasado 11 de julio.
Durante su discurso de clausura del octavo periodo de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el mandamás rechazó “categóricamente” los términos que describen a su sistema de gobierno como dictadura, autoritario, represivo y violento.
“Rechazamos categóricamente esos términos con los que tratan de ponerle etiquetas a una Revolución que en sucesivos actos de creación heroica se ha convertido en ejemplo a la hegemonía global del capital”.
Declaró el mandamás cubano mientras los cubanos mueren en derrumbes por la crisis de viviendas, de hambre por la falta de alimentos y en los hospitales por falta de medicinas.
Criticó además la “satanización” de su fallida revolución, afirmando que en redes sociales existe una “campaña de descrédito” en su contra.
“Cuba es un Estado socialista de Derecho y de justicia social, democrático, independiente y soberano, organizado con todos y para el bien de todos como República unitaria e indivisible”.
Dijo el mandamás citando la Constitución del 2019 y confirmando que sus esbirros la violan descaradamente.
Este nuevo episodio de “caradurismo” se suma al que ya protagonizó anteriormente, en donde aseguraba que en Cuba no existían los presos políticos.
“No hay presos políticos en Cuba. Lo que pasa es que muchas veces el propio imperio en su campaña mediática trata de vincular a la actividad contra la revolución, subvirtiendo el orden interno de Cuba, a personas a las que llevan a cometer delitos como hechos vandálicos”.
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Hasta la fecha, organizaciones de derechos humanos de la sociedad civil independiente en Cuba han documentado mil 283 personas detenidas a raíz de las manifestaciones del 11 de julio, que fueron reprimidas violentamente por el régimen cubano.
De ellas, al menos 540 continúan en prisión y otras 42 han sido condenadas en procedimientos sumarios.
Redacción Cubanos por el Mundo
