Ricardo Duque Solís es uno de los manifestantes del 11J que fue arrestado arbitrariamente por el régimen de Cuba. Encerrado en Combinado del Este, el antillano denunció que no ha recibido asistencia médica ni medicamentos para hacer frente a su enfermedad.
El preso político del régimen tiene 55 años de edad, padece hipertensión y es sobreviviente de un infarto cerebral. Considerando su delicado cuadro de salud, Duque Solís requiere revisiones médicas constantes, a las que no ha tenido acceso en prisión.
En entrevista para CubaNet, el antillano preso tras unirse a las históricas manifestaciones del 11J explicó que su condición requiere determinada dieta, además de tratamiento y medicamentos que no está recibiendo en Combinado del Este salvo en las contadas ocasiones en que sus familiares se los han podido hacer llegar.
“Yo soy hipertenso, tuve un infarto cerebral, y no me dieron atención médica ni medicamentos (…) Perdí la noción del tiempo porque lo mismo me interrogaban de día que de noche o de madrugada”
relató al medio independiente
Arresto de Ricardo Duque Solís tras unirse al estallido social del 11J
El pasado 11J, Ricardo Duque Solís salió en horas de la tarde tras enterarse de las miles de protestas que se llevaban a cabo en toda la isla. Según CubaNet, el antillano llegó a la calzada de Diez de Octubre y Enamorados, en el reparto habanero de Santos Suárez, estando allí pudo ver una perseguidora volcada, a la cual le tiró una pedrada a la puerta.
Días después, el 22 de julio, fue detenido y llevado a la estación de Policía de Aguilera, en donde se mantuvo por una semana. Posteriormente, lo trasladaron para el DTI de Diez de Octubre, donde lo tuvieron 15 días.
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Finalmente, en agosto fue trasladado a Combinado del Este, desde donde denunció que no ha tenido acceso a atención médica, pese a la complejidad de su situación.
Redacción Cubanos por el Mundo
