A partir de este miércoles 5 de enero, autoridades del régimen castristas exigirán a los viajeros la prueba de PCR para poder entrar a territorio cubano.
Es pertinente mencionar que estas pruebas tendrán que ser presentadas con una duración no mayor a 72 horas con respecto a la fecha de entrada a la isla, tal y como lo informaron las autoridades sanitarias la semana pasada.
Cabe destacar que estas medidas se deben al aumento de casos de la COVID-19 dentro de la mayor de las Antillas, una situación que empezó a darse paulatinamente a partir del 15 de noviembre, fecha en la que la dictadura decidió abrir sus fronteras, pensando únicamente en las divisas de los turistas y dejando a un lado la salud del pueblo cubano, que ya mucho tiene con tener que lidiar con la escasez de alimentos y medicamentos.
Entretanto, es muy importante recordar que, entre las otras medidas anunciadas por el MINSAP en la víspera de fin de año, también sobresale la de tener que realizar cuarentena obligatoria por al menos ocho días en un hotel que será destinado para este fin, y que será el mismo viajero quien tenga que correr con todos los gastos de transporte y hospedaje.
Al séptimo día de cuarentena, se le realizará una prueba PCR y, en caso de resultar negativa, se le dará el alta médica al octavo día.
Estas medidas aplicarán para todos los viajeros que se dispongan a entrar a Cuba, ya sean residentes o no.
Tras la reapertura de fronteras, ahora el régimen castrista lleva a cabo un intento desesperado de frenar el aumento de casos (situación que ellos mismos provocaron) a través de la modificación de las medidas de control.
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Redacción de Cubanos por el Mundo