La activista e historiadora de arte Anamely Ramos aseguró este viernes mediante una directa en su perfil de Facebook que, no quiere quedarse en Estados Unidos tras ser desterrada por el castrismo de Cuba.
Ramos dijo que, tuvo que moverse de locación para su protesta, y agradeció al personal del Versailles por acogerla en los últimos días. Cabe destacar que, en dicho establecimiento, ubicado en La Pequeña Habana, Ramos llevó a cabo una protesta pacífica luego de que el régimen no la dejara regresar a la isla.
“A pesar de que me propusieron un lugar en el interior del restaurante yo insistí en la necesidad de continuar una protesta pública, justamente para mostrar el desamparo al que me ha lanzado el estado cubano, en primera instancia, y en segunda instancia la aerolínea American Airlines, que no me dejo montar en el avión”, comentó Ramos.
La integrante del Movimiento San Isidro aseguró que, no quiere quedarse en Estados Unidos, “yo no voy a pedir asilo político, mi visa se vence en abril y no quiero pedir una extensión”, agregó.
Anamely Ramos cuestiona a American Airlines
Por otra parte, la activista cubana cuestionó que, la aerolínea americana American Airlines acatara la orden del régimen de Cuba sobre impedirle abordar el avión de regreso a La Habana.
“Esas son las consecuencias de que una aerolínea americana acate lo que dice el estado cubano, y actúe sin transparencia, porque no está haciendo público ni el protocolo que tiene con Cuba, ni está dando la cara, no ha hecho ningún comunicado oficial, no ha dado ninguna respuesta escrita. American se está dejando engañar, y ahora el gobierno le está pasando toda la responsabilidad”, sentenció.
Anamely Ramos afirmó que, seguirá en las calles de Miami protestando en contra de su destierro. “Si llega la policía yo voy a intentar tramitar de nuevo los permisos. Me han dado el permiso para la manifestación de hoy a las 5:30 de la tarde: la caminata hacia las oficinas de American Airlines”, comentó.
Por último, la historiadora de arte aseveró que, “esta situación migratoria ha sido provocada por un Gobierno que tiene las manos tan largas que llega a Estados Unidos”.
“Yo insisto en mi derecho no solo ya de regresar, sino de estar amparada aquí para regresar, yo siento que estoy amparada para quedarme, pero no siento el amparo para regresar”, añadió.
“Yo voy a apelar a las personas que me han estado acompañando todo este tiempo, y voy a cerrar fila con quien yo debo cerrar fila. Yo no me voy, yo voy a ser un problema aquí y en Groenlandia”, agregó.
Redacción de Cubanos por el Mundo.
