Un grupo de balseros cubanos empezó a respirar aires de libertad, cuando arribaron a tierras estadounidenses, específicamente a Cayo Hueso, y posteriormente se entregaron debidamente a las autoridades de ese país.
Según contó una fuente en exclusiva a Cubanos por el Mundo, fueron de ocho a nueve balseros cubanos (incluidos menores de edad) los que llegaron a la boya de Cayo Hueso, y quienes posteriormente se tomaron una fotografía que reflejó una inmensa alegría ante lo que sin duda alguna, evidenciaba un triunfo.
Lo más resaltante del caso es que, de acuerdo a lo informado por la fuente, la lancha que fue utilizada para esta travesía fue adquirida nada más y nada menos que a través de una presunta compra a un funcionario de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) en Playa Baracoa, en el municipio Bauta de la provincia de Artemisa, desde donde partieron los balseros.
“Aquí hay un reparto de tenientes de las FAR. Se le compró una lancha nueva de cero kilómetros, marca Yamaha. Se la compró y se echaron 18 horas en el camino. Salieron a las 2:00 de la mañana y llegaron a las 10:00 de la noche”,
reveló la fuente a Cubanos por el Mundo.
Es importante mencionar que, la persona que relató este hecho a Cubanos por el Mundo, reveló que estos corruptos esbirros de las FAR habitan en un reparto de Playa Baracoa destinado a funcionarios de este órgano castrista, y no es la primera vez, ni mucho menos, que venden embarcaciones nuevas a cubanos que buscan abandonar la miseria impuesta por la dictadura. “Varias personas lo ha hecho, y han venido hasta de Matanzas”, aseveró.
Cabe destacar que, según la fuente, este tipo de embarcaciones tienen un costo estimado hasta de 10.000 dólares, lo que deja en evidencia que la corrupción del régimen castrista sigue elevándose cada vez más, incluso promoviendo el éxodo masivo de cubanos por la vía marítima, aprovechando justamente la miseria que ellos mismo implementaron.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
