El sacerdote yoruba y preso político cubano del 11J, Loreto Hernández, fue enviado recientemente a un centro hospitalario desde la cárcel de Guamajal, en Villa Clara, presuntamente por presentar síntomas de hepatitis.
La información la divulgó su hermano, Jorge Luis García Pérez “Antúnez”, en una conversación con Radio Martí, quien además se mostró preocupado por la salud del preso político debido a que este presenta otros serios padecimientos en su salud, entre ellos, la hipertensión y diabetes.
“Este miércoles recibí la noticia de su hija, quien comunicó que su padre la había llamado desde la sala de penados del Hospital Provincial Armando Milián Castro, donde había sido trasladado horas antes producto a una supuesta hepatitis viral”,
comentó Antúnez al medio citado.
Asimismo, Antúnez agregó que el preso político ha perdido mucho peso durante el último tiempo, así como pérdidas de conocimiento. Con todo lo mencionado anteriormente, el religioso sigue siendo víctima de un secuestro que nunca tuvo qué ocurrir.
En tal sentido, los familiares de Loreto Hernández responsabilizaron al régimen castrista de lo que pueda ocurrir con la integridad física y mental del hombre.
“Estamos responsabilizando a la dictadura de lo que pueda ocurrirle, y hacemos un llamado a la opinión pública para que mantenga los ojos sobre la sala de penados de Armando Milián Castro”.
Es importante recordar que, hace poco más de una semana, familiares de Loreto Hernández denunciaron que la salud del preso político se debilitaba con el paso de los días, y que, para variar, dentro del recinto penitenciario no le otorgaban ni atención médica ni medicamentos.
El sacerdote yoruba Loreto Hernández es uno de los miles de cubanos que salieron a las calles durante el estallido social del 11J, y debido a eso, fue reprimido y encarcelado por los esbirros de la tiranía.
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Redacción de Cubanos por el Mundo