“Yo me voy a morir haciendo cola”, son las palabras de la jubilada cubana Ángela Rojas González, quien mediante una entrevista al medio independiente CubaNet relató la odisea que es sacar dinero en los cajeros automáticos del país.
Rojas González, jubilada por enfermedad, contó que, cobra su pensión con una tarjeta magnética, pero hacer dicha diligencia se convierte en un calvario debido a las largas colas.
“Vivimos solas, mi hermana y yo. Ella tiene más achaques y no puede salir de la casa”, indicó la mujer, quien contó que, acude a los cajeros en muchas ocasiones en diferentes horarios del día, pero siempre hay cola.
“Pero a toda hora siempre hay muchísima gente. Yo me voy a morir haciendo cola”, comentó.
Las colas no solo son los días de pago de salario y pensiones: el suplicio es diario.
— Cubanet 🇨🇺 (@CubanetNoticias) May 28, 2022
Los más afectados son los adultos mayores, con limitaciones físicas y enfermedades propias de la edad.
✏️ Fernando Donate#LeeDesdeCuba https://t.co/ZKJPyIkM6Q
Colas en los cajeros automáticos, otra problemática para el pueblo cubano
Desde que el régimen cubano implementó el pago de pensiones y salarios a través de las tarjetas magnéticas, las colas en los cajeros automáticos se han vuelto en otra de las problemáticas que aqueja diariamente al pueblo cubano.
Es importante recordar que, en el año 2021, a través de los canales electrónicos, se ofrecieron 160 millones de operaciones bancarias y se emitieron 2 millones 200 mil tarjetas magnéticas, más que en el año 2020.
El presidente del Banco Metropolitano (Banmet), Orlando López Garcés, dijo mediante una entrevista al periódico oficialista Granma que, “estamos hablando de 11 200 000 tarjetas que se han emitido con los diferentes actores económicos y con los distintos productos y servicios asociados a las mismas, que pueden ser una tarjeta de ahorro, de salario o de formación de fondos, entre otros”.
Vale mencionar que, los más afectados por estas grandes colas para sacar dinero en los cajeros automáticos cubanos son los adultos mayores, con limitaciones físicas, quienes sufren para cobrar una pensión que no les alcanza para cubrir sus necesidades básicas.
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Redacción de Cubanos por el Mundo