Las arbitrariedades del régimen castrista dentro de la isla comunista siguen cobrando vidas, incluso de aquellos que sirvieron a la mal llamada “revolución”, tal y como es el caso de un anciano cubano que, olvidado por el castrismo se dedicaba a vender frutas y verduras en la calle para poder sobrevivir, y se quitó la vida después de que inspectores le impusieran una injusta multa de 4 mil pesos.
El antillano de la tercera edad respondía al nombre de Ángel Pacheco Soublet, de 83 años, y tenía una carretilla en la que todos los días salía a vender frutas para poder llevar algo de comer a su casa.
En un video publicado por Cubanos por el Mundo, se constata que la familia del anciano cubano está destruida, después de que, Ángel decidió quitarse la vida al verse imposibilitado de pagar la multa que los funcionarios castristas le impusieron sin medir las consecuencias que podía traer esta arbitraria decisión.
De igual manera, se conoció que el “el señor Pacheco” como era conocido este antillano, vivía con su hija y su esposa, quien se encuentra postrada en una cama, en precarias condiciones en la provincia de Las Tunas.
“Es injusto lo que le hicieron a ese pobre viejo, que lo que ganaba era 1 mil 500 pesos y yo hasta sin trabajar estoy para poder cuidar a la vieja”, agregó la hija del anciano cubano mientras mostraba a su mamá en una cama postrada.
Los vecinos del anciano cubano también aseguraron estar consternados tras conocer la trágica noticia, debido a que lo consideraban una persona generosa.
“Un hombre de mucha lucha y de 83 años solamente”, apuntó una vecina.
Así paga el diablo (la revolución) a quien bien le sirve
Según datos que llegaron a la redacción de Cubanos por el Mundo, este anciano cubano sirvió al régimen castrista durante años, ya que fue internacionalista en la guerra de Angola y también era considerado un “revolucionario consagrado” que ahora deja a su esposa postrada tras suicidarse por culpa del castrismo.
No es primera vez que, en la isla se reportan casos de personas de la tercera edad que sirvieron “toda una vida” a la revolución y que años después de ser utilizados por los comunistas son desechados y condenados a morir en la miseria.
Por su parte, usuarios en las redes sociales comentaron que, este tipo de situaciones en las que inspectores del régimen castrista imponen multas injustamente son cada vez más comunes dentro de la isla.
“Yo vi, soy testigo de que una pareja de inspectores le pusieron 11 mil pesos a una madre con tres hijos, eso fue en las petrocasas aquí en Las Tunas”.
Dijo una internauta
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Redacción Cubanos por el Mundo