El preso político Adonis Garvizo Otero, secuestrado por la dictadura a raíz de su participación en el histórico estallido social de julio del año pasado, denunció recientemente haber recibido una excesiva condena como represalia del castrismo.
Recluido en la prisión de Valle Grande, Garvizo Otero, de 29 años, recibió nueve años de privación de libertad por los falsos delitos de “desacato”, “desórdenes públicos” y “atentado”, mismos que han sido utilizados por el aparato de injusticia del régimen castrista para castigar a quienes se expresaron pacíficamente y exigieron la libertad de su país.
Asimismo, este preso político relató al medio independiente CubaNet que, el 11 de julio del 2021, tanto él como el resto de los manifestantes llegaron de manera pacífica hasta el puente de La Lisa, donde fueron interceptados por los esbirros del régimen quienes, como de costumbre, implementaron la violencia.
Garvizo Otero fue secuestrado cuatro días después del estallido social, cuando lo buscaron en casa de su padre, luego de no encontrarlo en su residencia en El Palenque.
Tras su arbitraria detención, fue trasladado a la unidad policial de San Agustín, donde estuvo retenido por alrededor de cinco horas.
Posteriormente, fue llevado a la quinta unidad policial en Playa, permaneciendo un lapso de nueve días en ese lugar hasta ser llevado finalmente a las mazmorras de la prisión de Valle Grande, donde permanece hasta el día de hoy.
Su falso juicio se llevó a cabo el pasado 18 de abril del presente año en el Tribunal Municipal de Diez de Octubre. En primera instancia, su petición fiscal era de 12 años de cárcel. Luego, el régimen ratificó su condena a nueve años de privación de libertad.
El medio citado dejó saber que el preso político es padre de un menor de apenas seis años, y se desempeña como albañil y técnico medio en electricidad.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
