El activista cubano William Tamayo Ramayo fue entrevistado recientemente, donde contó su tragedia familiar por culpa del régimen.
A través de un video publicado en el canal de YouTube del medio Cubanet, Tamayo Ramayo compartió su dolorosa experiencia en los últimos meses.
“Estoy pasando por un momento muy duro en mi vida porque el día 20 de julio perdí a mi madre, y la perdí porque en Cuba los hospitales están colapsados. Mi madre sufría de dolores abdominales, la falta de aire que no se le quitaba, entonces como en el país no hay ni oxígeno, ni gel para los ultrasonidos, ni se pueden hacer placas, pues no le dieron atención médica que necesitaba”.
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Asimismo, aseguró que la historia se repitió con su señor padre, tan solo semanas después.
“El 15 de agosto, perdí a mi padre, que llevaba 30 años postrado en una cama. Donde nunca la doctora del consultorio lo vino a visitar, ni una trabajadora social. (Ese día) Le dije a la doctora (para) venir aquí a mi casa, a mi domicilio ¿Qué hizo la doctora? Llama a la ambulancia a las ocho de la mañana y la ambulancia se apareció aquí, como a las 12 de la tarde. Cuando llegamos al hospital mi padre falleció”.
Visiblemente afectado, William Tamayo Ramayo lamentó que sus padres hayan pagado las consecuencias de ser opositores a la dictadura y culpó al régimen castrista de crear dolor.
“Esos son los dolores que yo llevo, los dolores que la dictadura ha creado, porque nos tiene odio, a los defensores de Derechos Humanos. Esta es una dictadura cruel y genocida, liderada por Miguel Díaz-Canel y quien lo dirige a él, Raúl Castro”.
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Por otra parte, Tamayo Ramayo denunció la corrupción que hay en el sector salud por parte de los médicos que aceptan dinero.
“No hay anestesia, no hay agua, no hay guantes, no hay jeringuillas, pero hay personas que por detrás les pagan a los médicos y entonces todos esos insumos aparecen. Hoy los médicos en Cuba están siendo corruptos”.
Para finalizar reveló que la dictadura también le ha quitado la posibilidad de trabajar para ganarse la vida.
“Los antibióticos en el mercado negro cuestan 300 pesos que yo no puedo pagar porque no trabajo, pero no trabajo porque la dictadura no me deja porque soy opositor”.
Redacción Cubanos por el Mundo
