Los jóvenes deportistas de la isla siguen huyendo de la falta de oportunidades provocada por la miseria castrista. Esta vez, le tocó al pelotero cubano Yunior Charadán tomar la difícil decisión con el objetivo de buscar un mejor futuro tanto en lo personal como en lo profesional.
La información fue confirmada por el periodista Francys Romero, quien acotó que el joven jugador resultó ser uno de lo más destacados tanto del equipo de Guantánamo como de la selección de Cuba en las categorías juveniles.
“Nacido en Guantánamo, es hijo del conocido Nala Charadán que jugó varias Series Nacionales con los Indios del Guaso entre 1994 y 2001”, acotó el reportero.
Con apenas 17 años, a Charadán lo caracteriza su estatura y complexión física, que además lo ayudan a desarrollar un buen juego ofensivo dentro de los terrenos de juego.
En su última participación en el Campeonato Nacional Sub-18 de la pelota cubana, logró dejar una línea de .273/.395/.354, además de conectar tres dobles, un doblete y un batazo de vuelta.
En cuanto a sus habilidades defensivas, el periodista dejó saber que Charadán puede jugar sin ningún problema en la primera, segunda y tercera base. “Se proyecta como un corredor por encima del promedio y excelente bate con poder”, destacó Romero.
De esta manera, ahora este joven pelotero cubano tendrá que seguir mejorando sus habilidades para así poder llamar la atención de los diferentes scouts del béisbol estadounidense, y posiblemente contar con oportunidades de estampar su firma con alguna organización.
El próximo mes de diciembre, Yunior Charadán cumplirá los 18 años y, de seguir demostrando sus habilidades tal y como la ha hecho hasta ahora, seguramente más temprano que tarde podrá convertirse en un profesional.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
