Este miércoles comenzó una Conferencia de Negocios Cuba – Estados Unidos en La Habana entre empresarios de EEUU, incluyendo cubanoamericanos que abogan por el “deshielo”, y representantes de la dictadura castrista.
Un hecho que demuestra la farsa que repite el régimen, ya que denuncia que Cuba es “víctima” del “bloqueo” de los Estados Unidos, pero busca establecer relaciones con los empresarios de esa nación.
La conferencia se está llevando a cabo en el Hotel Nacional de Cuba, en La Habana y cuenta con la presencia de empresarios que simpatizan con el régimen castrista como el cubanoamericano Hugo Cancio, dueño de la página de venta de alimentos Katapulk y medios como OnCuba.
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A pesar de echarle la culpa a EEUU de todos los problemas de la isla, el régimen castrista busca acercamientos con la administración de Joe Biden.
Así lo demostró Peter Phillips, representante del grupo Focus Cuba, quién señaló que, “aunque el presidente Joe Biden no ha cumplido con su palabra de en gran medida volver a adoptar las políticas de la administración Obama, Cuba concretó avances significativos en lo relativo a la participación de actores no estatales en la economía”, según relató un medio de la dictadura.
Phillips, quién también es uno de los organizadores de la conferencia, junto a la Cámara de Comercio de Cuba, indicó que examinarán “posibles negocios”.
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— MINCEX🇨🇺 (@MINCEX_CUBA) October 26, 2022
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“Durante el encuentro vamos a examinar todo el espectro de posibles negocios en que podemos participar, pero la posibilidad de que socios extranjeros se vinculen con empresas privadas en Cuba es algo nuevo y da a nuestra gente una curiosidad particular”.
Según Phillips, Cuba está actuando de forma significativa “en la participación de actores privados en la economía” haciendo alusión a la reforma de 2021 que permite la creación de pequeñas y medianas empresas o MIPYMES autorizadas por la dictadura, y que estuvieron prohibidas desde 1968.
No obstante, algunos expertos en la materia consideran que esta sería una de las artimañas que usaría el régimen comunista de la isla para hacer negocios con Estados Unidos evadiendo las sanciones que prohíben a las compañías de EEUU comercializar con empresas estatales que pertenecen al castrismo.
La conferencia se extiende hasta el 28 de octubre, cuando tendrá lugar una macro ronda de negocios. También habrá “conferencias sobre el contexto actual de las relaciones bilaterales, las transformaciones en la economía cubana y las posibilidades de inversión extranjera en la Isla, así como visitas al Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, al Parque Científico – Tecnológico de La Habana y la Finca ‘Vista Hermos”, indicó un medio vocero del régimen.
Sin embargo, lo que más genera indignación es que ni los representantes del régimen, como ni los medios de la dictadura o los empresarios estadounidenses que claramente abogan por el fin del embargo, mencionan las graves violaciones a los Derechos Humanos que el castrismo ha cometido por décadas sin haber pagado por ninguno de esos delitos.
Redacción Cubanos por Cubanos
