El líder opositor José Daniel Ferrer, quien durante los últimos días presentó un estado de salud crítico, decidió abandonar la huelga de hambre que había comenzado hace casi dos semanas.
Así lo confirmó su hermana, Ana Belkis Ferrer, a través de las redes sociales, acotando que fueron exactamente 12 días los que el preso político estuvo realizando la protesta, luego de ser brutalmente golpeado frente a sus seres queridos en la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba.
“Gracias a Dios, depuso la huelga de hambre que protagonizaba hace 12 días. El sicario castrista, conocido como Julio Fonseca, entregó las correspondencias a su esposa Nelva Ortega”, mencionó en una publicación de Facebook.
Trascendió que, tras abandonar la huelga de hambre, José Daniel Ferrer pudo comunicarse telefónicamente con su familia por apenas tres minutos, donde relató el infierno que vivió en carne propia durante estas últimas dos semanas.
“Pudo denunciar con mayor precisión todo lo que le hicieron el día 9 de diciembre. Lo golpearon hasta dejarlo inconsciente, tirado en el piso y en muy mal estado. El jefe de la prisión, de apellido “Pineda”, le golpeó con mayor saña, hasta verlo desfallecer; le pateó su rostro, le partió la nariz, lo golpearon por los riñones, costillas, por todas partes”, detalló Ana Belkis Ferrer.
Posteriormente, fue encerrado en una celda de castigo donde, para colmo de males, presentó cuadros de fiebre, y no fue hasta cinco días después que los guardias acudieron a la mazmorra para asegurarse de que siguiera con vida.
“Apenas puede moverse y, en tales condiciones, prefiere negarse a recibir atención médica de los verdugos que casi lo matan”.
En otro orden de ideas, es importante recalcar que, recientemente, el hijo de José Daniel Ferrer, que lleva su mismo nombre, llegó a Miami luego de huir de la isla tras la presión de los agentes de la Seguridad del Estado.
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Redacción de Cubanos por el Mundo