A través de las redes sociales, fue visibilizado el caso del preso político Yoel Díaz Hernández, secuestrado por el régimen castrista tras su participación en las históricas protestas que acontecieron el 11J de 2021.
Según informó el activista Marcel Valdés en sus redes sociales, Yoel cuenta actualmente con 46 años de edad y su manifestación se produjo en San Antonio de los Baños.
Trascendió que, al momento de su arresto (ocurrido el mismo 11J) fue salvajemente golpeado por los cobardes esbirros de la tiranía, al punto de recibir un impacto en la zona de su nunca con una de las tonfas de los agresores.
Actualmente, este preso político permanece en la cárcel de máxima seguridad de Guanajay, donde además de estar encerrado sin haber cometido ningún delito, debe lidiar con el maltrato de las autoridades.
“A Yoel lo arrestaron el mismo 11 de julio y durante su arresto fue golpeado brutalmente donde recibió un fuerte golpe por la nuca con una tonfa. Dentro del penal también ha sido maltratado física y psicológicamente”, puntualizó Marcel Valdés.
Antes de entrar a las mazmorras, el preso político tenía un peso corporal de 90 kilogramos, y debido al deterioro de su salud y las pésimas condiciones del recinto penitenciario (incluyendo la “comida” que recibe) hoy en día pesa 72 kilogramos.
Fue sentenciado a cinco años de privación de libertad por los falsos delitos de “propagación de epidemia”, “desacato” y “atentado”, todos inventados por los títeres del régimen para castigar a una persona que no hizo nada malo.
Díaz Hernández es padre de tres hijos; tres hijos que fueron su principal motivo para salir en aquella histórica jornada y pelear por dejarles un mejor futuro, y no tener que pasar por lo que miles de cubanos ya han pasado: la miseria y el caos una y otra vez.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
