A través de las redes sociales, fue expuesto el caso del joven preso político Adel de la Torre Hernández, secuestrado por el régimen castrista por su participación en las históricas protestas del 11J.
La información fue suministrada por el activista Marcel Valdés en su cuenta de Facebook, acotando que este joven antillano también fue uno de los voluntarios que ayudó a las víctimas del Hotel Saratoga. Sin embargo, eso la dictadura prefiere pasarlo por alto.
“Adel trabajaba para el SIUM y fue uno de los voluntarios que estuvo cuando la explosión del Hotel Saratoga, rescatando personas entre los escombros. Adel estuvo en prisión domiciliaria en espera del juicio”, especificó el activista.
En octubre del año pasado, las autoridades realizaron su falso juicio y, por si fuera poco, los esbirros se lo llevaron arbitrariamente de su casa sin al menos presentar una notificación. No fue hasta dentro de la cárcel que el preso político se enteró de su condena.
“El 3 de octubre de 2022 le celebraron el juicio donde no hubo ninguna prueba contra él, y el 17 de octubre, sin presentar ningún documento escrito ni ninguna notificación del veredicto, el régimen se lo llevó de su casa y hasta hoy no ha regresado, en prisión fue donde se enteró de su injusta sanción”.
Adel fue sentenciado a siete años de privación de libertad, acusado de los falsos delitos de “desorden público”, “desacato” y “atentado”, y actualmente se encuentra dentro del penal de Valle Grande.
Es importante mencionar que su secuestro se produjo el mismo 11 de julio de 2021, momento en el que fue víctima de violencia por parte de los cobardes esbirros del régimen castrista.
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Redacción de Cubanos por el Mundo