Una de las dos hermanas de la presa política Yarelis Mesa Vázquez permanece desaparecida, denunció Prisoners Defenders.
En un comunicado urgente, fechado este sábado, se conoció que las dos hermanas intentaron escapar de la miseria y la represión comunista.
Salieron el pasado lunes 23 de enero, a las 8:30 de la mañana en una balsa. “La embarcación encalló a 25 millas de la costa de Cuba el martes a mediodía”, dice el comunicado.
Una de las jóvenes, Yamilis Triana Vázquez, de 35 años, permanece desaparecida y su familia está consternada, en especial la madre, Marta Vázquez Molina.
“Mis hijas salieron el día 23 en una embarcación para Estados Unidos y el barco se hundió y naufragó. Una se salvó y la otra todavía no la han encontrado porque no la buscaron por la noche. Los que están apareciendo están muertos”, dijo.
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Marta, una mujer separada de 56 años, tiene 4 hijas y un hijo, entre ellos Yarelys Mesa Vázquez, de 25 años, una de las manifestantes del #11J.
Yarelys y su esposo, salieron a las calles a protestar aquel 11 de julio de 2021, y las autoridades los detuvieron horas después.
“Las autoridades, por medio de la investigación prospectiva, es decir, la confiscación y violación ilegal de los datos personales, vídeos y fotos de los móviles confiscados de los manifestantes, sin orden judicial, identificaron en la manifestación a Yarelys y Gilberto.”
El comunicado de Prisoners Defenders, al cual tuvo acceso Cubanos por el Mundo, relata el calvario que ha vivido la pareja, acusados por la dictadura castrista de “Robo con Fuerza” y sentenciados a “horribles sentencias de privación de libertad”.
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Ambas hermanas decidieron escapar de Cuba, huyendo de la represión y el hostigamiento al que es sometida la familia.
El hecho de tener familiares entre el millar de presos políticos que hay en las mazmorras de la dictadura, fue un detonante para lanzarse a la mar.
“En Cuba, en violación del artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, diversos artículos del Código Penal anterior y el vigente castigan con pena de prisión el simple hecho de dejar el país”, añade el comunicado.
“Yailín y todos los supervivientes del naufragio se encuentran en prisión provisional por orden de la fiscalía sin que juez alguno haya intervenido en su caso. Lejos de ser llevados al hospital y luego a sus casas para su recuperación, se encuentran encerrados como criminales, a pesar de que la propia hermana de Yailín haya perdido la vida en el naufragio. Ni oportunidad para llorar la pérdida de la hermana han tenido ninguno de los supervivientes.”
Sobre el naufragio, Prisoners Defenders asegura que uno de los balseros nadó durante horas hasta un faro e hizo señas a una embarcación con una linterna.
Pero los tripulantes de esa embarcación no fueron hasta ellos, por temor a represalias de la dictadura, que impide recoger a víctimas de naufragios.
“Estuvo toda la noche a la vista de la embarcación, pero no fue hasta por la mañana que se acercaron a él y cuando ya es entonces que se acercó el barco guardafronteras. Una vez recogido por el guardafronteras, al chico lo llevaron preso junto con la hermana superviviente, Yailín, y al resto de supervivientes después.”
El naufragio sucedió el martes a medio día, pero sólo en la mañana del miércoles se les fue a buscar.
“Mi hija apareció toda desbaratada. Yo quiero denunciar esto. Y mi otra hija no ha aparecido, a estas alturas. Si la hubiesen buscado esa misma noche, a lo mejor estuviera aquí con nosotros, dejó dos hijos aquí”, dijo la madre, ahogada en llanto.
Redacción Cubanos por el Mundo
