Su primera niñera renunció en menos de una semana después de verse obligada a trabajar 16 horas al día, los siete días de la semana
Una de las principales razones por las que Jennifer López es tildada de diva, es por la forma en que trata a las personas que trabajan para ella.
Varios de sus ex empleados afirman que la Diva del Bronx, Jennifer López, no es la celebridad con la que tú quisieras trabajar. Con ella han tenido problemas algunos de sus ex empleados. La han acusado de pagar mal, de no cumplir con lo establecido, etc., pero por lo general refieren que su carácter es complicado.
Jennifer López ha sido acusada de pagarle de menos a su conductor, y de despedir a bailarines de respaldo debido a su signo zodiacal.
Ahora ha salido a la luz otro episodio que no deja muy bien parada a esta Diva que, tres décadas atrás, andaba con un vestidito muy sencillo, en sandalias, enjorquetada en la parte trasera de una moto Berjovina, por Santa Fé, en La Habana.
El asunto que la salpica ahora tiene que ver con una azafata.
Según confirmó el medio que sacó la noticia, Jennifer López evitó hablar directamente con una azafata y en su lugar recurrió a su asistente personal, cuando pudo hacerlo ella directamente.
The Things describe a Jennifer López como “una famosa cantante y actriz que se ha visto atrapada en muchas (…) controversias” relacionadas con “celebridades que maltratan a las personas que trabajan para ellos” y también por sus “numerosas disputas con otras celebridades conocidas a lo largo de los años.”
“No es ningún secreto que, en más de una ocasión, las grandes celebridades se engrandecen tras alcanzar la fama y el reconocimiento internacional,” señala The Things, dando a entender que más allá de sus canciones y películas, Jennifer López es una engreída.
El portal afirma que “no es ningún secreto que J.Lo no es la mejor celebridad para trabajar.”
“De hecho, es probable que sea alguien a quien querrá evitar como empleador. Si no lo cree, pregúntele a su primera niñera, quien renunció en menos de una semana después de verse obligada a trabajar 16 horas al día, los siete días de la semana,” acuñan.
Si bien Jennifer López es una de las artistas hispanas más influyentes de todos los tiempos, hay que recordar que ella era apenas una bailarina de respaldo al comienzo de su carrera, hasta que lña muerte de Selena Quintanilla le dio la oportunidad de su vida.
Este accidente, fortuito, fue el despegue en la carrera de Jennifer Lopez. No pocos afirman que de no haber muerto Selena, el gran papel de Jennifer López nunca hubiese llegado, porque como actriz ella es una más. No es como Meryl Streep, Cate Blanchet, por mencionar dos de las buenas.
Fue este papel, en el año 1997, lo que la catapultó. Vendrían después, casi en 12 meses, Anaconda (1997) y Out of Sight (1998).
Nada relevante vino después (The Cell (2000), The Wedding Planner (2001), Shall We Dance? (2004) y Monster-in-Law (2005), pero lo cierto es que, compaginando su carrera como actriz y cantante, ha llegado a convertirse en un ícono de la cultura pop y una de las cantantes y actrices hispanas más influyentes de todos los tiempos.
The Things detalla que sus ventas globales están estimadas en 80 millones de discos, pero además tiene una recaudación de películas acumulada de más de $ 3 mil millones.
“Es fácil entender cómo J.Lo ha acumulado su patrimonio neto de $ 400 millones,” explica la revista.
Pero, paralelo ha eso también, ha estado involucrada en numerosas controversias durante su carrera y “se ha peleado con muchas celebridades diferentes a lo largo de los años, incluidas estrellas como Mariah Carey, Brandy y una pelea rumoreada con Cameron Diaz cuando trabajaron juntos en la película What to Expect When You’re Expecting.“
No es siquiera fácil Jennifer López fuera de cámaras. La actriz Rosie Pérez reveló que “J.Lo manipuló su vestuario y maquillaje a su favor cuando trabajaron juntas en el programa In Living Color.“
Tal parece que J-Lo es la típica adolescente que le gusta salir delante y en el centro de las coreografías y las fotos.
“Pérez también ha admitido que ella y el resto de los bailarines del espectáculo consideraban a J.Lo una diva por su forma de actuar detrás del escenario,” describe la revista.
Ahora, los fanáticos han quedado decepcionados tras conocer que Jennifer Lopez evitó hablar directamente con una asistente de vuelo.
Todo sucedió aparentemente en un vuelo comercial. Jennifer López viajaba en primera clase, cuando una azafata le ofreció una bebida. En lugar de responderle directamente, sí o no, Jennifer López se negó a responder y, en cambio, se viró hacia su asistente personal y le dijo que le dijera a la azafata que le sirviera una Coca-Cola Light con lima.
Y claro, no olvidemos cuando reveló por qué no quería compartir escenario con Shakira y expresó:
“Fue la peor idea del mundo”
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