Son muchas las cartas que Hugh Dieter Pupo, hijo del preso político Samuel Pupo Martínez, le ha escrito a su padre, pero ahora, el joven decidió dirigirse directamente a Dios para suplicar ayuda.
A través de las redes sociales, fue compartida la carta que el pequeño escribió con su puño y letra, pidiéndole al Todopoderoso ayuda para que su papá “esté en casa ya”, y no encerrado en una mazmorra sin merecerlo.
En la misiva, Hugh calificó al preso político como “el mejor papá del mundo” y, al mismo tiempo, relató con visible dolor la amarga situación que este está atravesando en la cárcel, confesando al mismo tiempo el miedo que siente porque le pase algo aún más grave.
“Papá, esta cartica no será para ti. Hoy quiero escribirle a Dios para que me escuche. Diosito, llevo mucho tiempo pidiéndote que me ayudes para que mi papá esté en casa ya. Es el mejor papá del mundo y está muy flaquito y enfermito. Tengo mucho miedo que se muera. Ya lleva mucho tiempo en ese lugar tan feo”, escribió el joven Hugh Dieter.
Por otro lado, el hijo del preso político dejó saber que, el próximo 21 de febrero, llegará a la edad de 14 años, y ahora mismo su único deseo es poder contar con su progenitor en un día tan importante no solo para él, sino también, justamente, para Samuel Pupo Martínez y Yuneisy Santana, su madre.
“El 21 de febrero cumplo 14 años, otro cumpleaños sin él. Lo único que quiero es tenerlo en casa, abrazarlo, besarlo, dormir con él y hasta que me regañe. Nosotros nunca nos habíamos separado tanto tiempo: él me ayudaba con las tareas, hablábamos muchas cosas de hombres. ¡Fíjate cómo lo extraño!”.
Finalmente, reveló que sus mayores momentos de desahogo ocurren durante las noches, momento que aprovecha para llorar en silencio con la intención de que su madre no lo vea y, en consecuencia, se ponga más triste.
Pese a tanta tristeza, Hugh no olvidó agradecerle a Dios el regalo de Reyes de Magos. “Me gustó mucho. Siempre quise tener un guante y una pelota de verdad”, escribió.
Entretanto, cabe recordar que Samuel Pupo Martínez fue sentenciado a tres años de privación de libertad por su participación en las históricas protestas del 11J.
Desde su reclusión, su vida ha estado en constante peligro y a las autoridades, como siempre, no les importa en lo absoluto.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
