Las panaderías de La Habana siguen haciendo de las suyas con la venta del pan que ofrecen al pueblo con pésima calidad.
Pero además de esto, los cubanos también se han quejado por el peso de este alimento, lo que ha sido confirmado por los especialistas castristas de fiscalización y calidad de la EPIA que visitaron algunas panaderías de la capital cubana y “descubrieron” lo que ya se sabía.
En un reportaje del medio castrista Tribuna de La Habana, reconocen que el pan ofrecido a los cubanos es “fuera de norma” o “bajo peso”, y esto significa que no cumplen con las especificaciones con el peso que debe ser de 80 gramos.
La situación con el pan y su mala calidad ha sido consecutiva, porque, aunque los cubanos se quejan de lo que está ocurriendo, en pan ofrecido en la isla, tiene mal sabor, olor y son duros, incluso al extremo de que las personas no se lo pueden comer.
A esta situación se suma el problema con el peso, pues ahora han descubierto que en las panaderías de La Habana están vendiendo el pan, que debería ser de 80 gramos, con un gramaje de 50 gramos, lo que representa una total falta de respeto para el pueblo y que la dictadura no hace absolutamente nada para evitarlo.
Cola en panadería ubicada en el reparto Buenos Aires, Camagüey.#SOSCuba #CubaTieneQueCambiar #Cuba pic.twitter.com/wBcBYEPOLy
— Observatorio Cubano de Derechos Humanos (@observacuba) March 28, 2023
Las explicaciones que dan los panaderos sobre esta situación están relacionadas con la escasez de harina y el resto de la materia prima, el aumento de precios de los ingredientes y un tema muy peculiar es que, en la isla, en las panaderías han tenido que modificar las recetas para sustituir ingredientes y poder ofrecer pan a los ciudadanos, pero esto solo causa que este alimento se ponga duro.
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Redacción Cubanos por el Mundo