En la isla comunista, ni siquiera la Semana Santa es impedimento para que la dictadura despliegue a su aparato represor, y quedó demostrado cuando Berta Soler y Ángel Moya fueron detenidos durante el Domingo de Resurrección.
Según el testimonio del mismo Moya a través de sus redes sociales, la detención se produjo alrededor de las 12:30 del mediodía, momento en el que salieron de la sede de las Damas de Blanco a reclamar por la libertad de los presos políticos.
“Sobre las 12:30 del mediodía del domingo, Berta Soler y yo salimos de la sede de las Damas de Blanco y, por orden de los represores de la Seguridad del Estado, fuimos interceptados y arrestados por mujeres PARAMILITARES, quienes nos trasladan hacia dos autos con matrículas privadas”, dijo el expreso político en su publicación.
Berta Soler estuvo recluida en la unidad policía de San Miguel del Padrón, mientras que Moya estuvo en las mismas circunstancias, pero en su caso, en la unidad de Guanabacoa.
Trascendió que la líder de las Damas de Blanco recibió una nueva y absurda multa de 40 pesos, que se suma a otras tantas que le han impuesto injustamente.
Ambos opositores fueron puestos en libertad pasada las 6:00 de la mañana de este lunes en la vía pública, justamente en el mismo lugar donde practicaron su detención.
De esta manera, se mantienen las jornadas represivas durante las jornadas dominicales, una situación que se intensificó desde enero del año pasado, cuando la misma Berta Soler anunció el regreso del movimiento a las calles para exigir al régimen castrista la libertad de todas las personas secuestradas por motivos políticos, y que no cometieron ningún delito para tener que estar encerrados en unas mazmorras.
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Redacción de Cubanos por el Mundo