La delincuencia sigue desatada en cada rincón de Cuba, y ni siquiera los estudiantes se salvan de ello. En las últimas horas, fue reportado un nuevo asalto a la Universidad de Oriente, situación que terminó con una estudiante herida.
Según la información trascendida en las redes sociales, este nuevo hecho delictivo se originó a las 4:00 de la madrugada de este mismo jueves, cuando antisociales irrumpieron en el recinto santiaguero para atacarlo a pedradas.
Las más afectadas fueron dos estudiantes de Sociología que, para ese momento, se encontraban reposando en su habitación de la residencia estudiantil. Una de las piedras impactó en su cabeza, provocando una lesión considerable.
“Me acaban de mandar esta denuncia desde la Universidad de Oriente, azotada desde hace tiempo por una ola delictiva que tiene a los estudiantes en vilo. Esta madrugada, a las 4:00 a.m., asaltaron a pedradas en su cuarto de la residencia estudiantil a dos estudiantes de 4to año de Sociología”, mencionó Pedro Pérez en su cuenta de Facebook.
Trascendió que no es la primera vez que situaciones similares ocurren en la Universidad de Oriente, y pese a las constantes denuncias, los estudiantes son ignorados por las autoridades.
“Ya vienen denunciando este problema desde hace meses, incluso me dicen que hay un cartel en la residencia de la misma universidad que les aconseja a los estudiantes guardar los teléfonos porque pueden ser asaltados”, añadió Pérez.
El internauta cuestionó el nulo accionar de los cuerpos de “seguridad” de Santiago de Cuba, que claramente prefieren reprimir antes que combatir a la ola de delincuencia que azota no solo a la universidad, sino a toda la región.
“Y yo me pregunto: ¿Dónde está la policía? ¿Cómo puede haber suficiente personal para perseguir y hostigar a los disidentes y no para proteger a los estudiantes universitarios? Una vergüenza para la PNR y el MININT”.
Y es que, para nadie es un secreto que en la isla comunista, la policía solo sirve para generar violencia contra los más inocentes, mientras que los verdaderos malhechores se pasean a sus anchas por las calles sin ni siquiera ser perseguidos.
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Redacción de Cubanos por el Mundo