La Asamblea Municipal del Poder Popular Plaza de la Revolución, informó a través de sus redes sociales que, en el mercado 17 y K, fue multado el jefe de un punto de venta y su dependiente por vender a la población cubana un supuesto jamón que tenía espinas de pescado.
Dicha entidad castrista recordó que, el pasado domingo, se había denunciado que, en uno de los establecimientos de dicho mercado, se estaba comercializando un supuesto jamón Vicky, el cual traía dentro espinas de pescado, asimismo se reportó la falta de higiene del punto de venta donde se expiden los productos cárnicos.
Tras esto, el grupo Gente de Barrio, liderado por el presidente del Consejo Popular Rampa, Pedro Elizalde, informó que el jefe del punto de venta y el dependiente recibieron una multa de 8 mil pesos cubanos cada uno.
Asimismo, indicaron que, el lugar se cerró y solo podrá abrir sus puertas “tanto se restablezca una adecuada higiene”.
Por otra parte, indicaron que, dieron por terminado el contrato con el trabajador por cuenta propia que suministraba el supuesto jamón al punto de venta.
Cubanos reaccionan ante la multa impuesta al jefe del punto de venta en 17 y K
La entidad castrista agregó además que, se encuentran buscando los datos del trabajador por cuenta propia originario de Bauta, para tramitar con la provincia de Artemisa una inspección sanitaria en el establecimiento donde produce dicho alimento, para luego dar conocimiento sobre el asunto.
Es importante mencionar que, luego de que se difundiera la sanción impuesta para el jefe del punto de venta, los ciudadanos cubanos no tardaron en reaccionar y rechazaron que, una multa de 8 mil pesos sea el castigo para esta persona que vende estos alimentos para la población habanera.
“¿8 mil de multa? Eso lo hacen en media mañana. Es irrisorio el ‘rigor’ de algunas medidas aquí. Ah, pero sacan un cartel y preso sin noticias. Vergüenza”, dijo indignado un antillano llamado Alejandro Acosta Echavarría.
Por otra parte, un ciudadano cubano identificado como Jorge Hernández Álvarez, afirmó que, no es la primera vez que en este agromercado estatal se comercializan alimentos en mal estado, razón por la cual aseguró que dejó de comprar en el mismo.
“Pero en 17 y K eso viene pasando por menos desde el año pasado, yo dejé de comprar allí por eso mismo y de hecho pasé a comprar el jamón en el mercado de Tulipán y Boyeros y resulta que me encuentro el mismo problema de las espinas. Resultado: No compro jamón porque te lo venden como dije, con espinas, supercaro y ni a jamón sabe”, aseveró el antillano.
Redacción de Cubanos por el Mundo
