En la isla comunista, la violencia y la delincuencia se incrementan más con el pasar de los días, y en las últimas horas, salieron a la luz dos nuevos casos que sacudieron a distintas zonas del territorio.
Uno de estos acontecimientos ocurrió en Villa Clara a comienzos de este mes, cuando un habitante fue apuñalado por delincuentes en un intento de robo.
Ignacio Estrada, hermano de la víctima, cuestionó el pésimo actuar de la policía de esa entidad, que prácticamente no ha hecho nada para hacer justicia.
“Estoy acusando públicamente la ineptitud de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) del Municipio de Santo Domingo, provincia de Villa Clara. Al igual les hago responsables por la integridad física de mi hermano y demás familiares, quienes han venido denunciando lo sucedido”
“Ineptitud que se pone de manifiesto a la hora de actuar y de investigar un hecho de sangre ocurrido en la noche del lunes 1 de mayo frente a la candonga de este poblado, donde resultara apuñalado mi hermano Michael Estrada Cepero”, escribió Estrada.
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Lo peor del caso es que fue la misma familia la que se encargó de investigar a los delincuentes y, pese a entregar pruebas a la policía, los agentes siguen sin mover un solo dedo.
“Han transcurrido más de 72 horas de este hecho de sangre y aun la policía no les da captura, a la pregunta e interrogante de amigos y familiares solo responden que están investigando”.
Otro acto de violencia ocurrió en Boyeros, La Habana, también la semana pasada, cuando antisociales interceptaron a un joven para intentar despojarlo de sus pertenencias.
Sin embargo, este opuso resistencia y fue atacado con un arma blanca. Como suele suceder, tuvo que esperar un tiempo considerable para ser trasladado a un centro médico.
“No le pudieron quitar nada, me dice, más que nada porque solo tenía la bicicleta y el teléfono, nada más y se aferró duro. Estaban esperando un carro desde no sé qué hora, para hacerle la historia de las lesiones leves: un golpe en el cuello, otro en las costillas, aunque parece de momento que lo asalto un gato, en lo que llega el carro seguro no tiene nada ya”, se lee en la denuncia.
De esta manera, vuelve a quedar demostrado que lo que abunda en Cuba es violencia y más violencia, al mismo tiempo que las autoridades, en lugar de combatir esta situación, prefiere seguir creando caos contra quienes claman por el fin de la pesadilla.
Redacción de Cubanos por el Mundo
