Wilber Parra, director de los molinos Turcios Lima, informó que, el pasado 4 de junio, sobre las siete de la noche procedieron a descargar 21 mil toneladas de trigo canadiense, que tuvieron que ser descargadas “con premura” porque “la población no permite otra cosa”, lo cual causó que, no se extrajera la cantidad de harina deseada.
El directivo dijo al medio oficialista Trabajadores que, el rendimiento actual de la empresa es de 72 o 73 por ciento, el mismo que con mejores equipos “pudiera” alcanzar un 75%, sin embargo, el estado técnico de los mismos “no es óptimo”.
Según la información suministrada por el medio antes citado, los Molinos Turcios Lima, ubicado en el municipio habanero de Regla, es uno de los cinco que existen en la isla, y está integrado por 180 trabajadores.
Parra indicó que a la empresa antes llegaban hasta tres barcos cargados de trigo, pero ahora no, por lo cual los empleados deben usar el tiempo entre descarga y descarga para realizar mantenimientos en la misma.
Harina: La jugada está “apretá” https://t.co/JpJAOMuCyL
— yankier (@yankier17) June 21, 2023
“Hoy tenemos un ritmo bueno y logramos unas 500 toneladas más de descarga que lo pactado con los barcos, lo cual es muy bueno, porque esos trabajadores pueden ganar entonces por pronto despacho”, dijo el directivo.
Escasez de harina en la isla provoca la desaparición del pan
El funcionario castrista declaró que, normalmente, producen 90 toneladas de trigo diarias, cantidad que pueden trasegar sin problemas para las provincias, “pero ahora hemos tenido que cabotear trigo 24 horas, por lo que el personal encargado de esa tarea, entre ellos los del pesado y el almacén, han trabajado en horarios emergentes”.
Asimismo, precisó que, en “tiempos normales” el molino garantiza la harina destinada a las provincias de Mayabeque, Artemisa y La Habana, la cual también recibe del molino José Antonio Echeverría e Imsa, y en menor medida Pinar del Río.
Debido a la escasez de harina y la poca producción de trigo en Cuba, la empresa ha tenido que enviar el alimento a Santiago de Cuba, Guantánamo y otros territorios.
“Cuando empieza la descarga no paramos hasta extraer todo el trigo de las bodegas del barco”, aseguró Parra, tras comentar que, el personal debe trabajar en dos turnos de 12 horas para poder descargar el trigo.
“Fíjese usted, en circunstancias como está el sistema tiene que funcionar como un reloj. Nada nos puede fallar”, añadió.
Es importante mencionar que, la escasez de trigo que se vive en Cuba y posteriormente de harina, ha provocado la ausencia del pan y la mala calidad del mismo en establecimientos estatales, alimento muy demandado por la población cubana que constantemente se queja del régimen por la falta de interés para resolver la problemática.
Redacción de Cubanos por el Mundo