La muerte de un bebé por infección respiratoria, y que apenas había llegado al mundo hace unos días, conmocionó a los habitantes de Guisa, en la provincia de Granma.
En dicha localidad granmense, muchos son los ciudadanos que se quejan por la falta de medicamentos y las pésimas condiciones de los hospitales. Sin embargo, el internauta Dariem Toledo, en Facebook, afirmó que tal situación no es culpa de los médicos, sino más bien del precario sistema de salud cubano que impera en cada rincón del país.
“Me enteré de la triste noticia de la muerte de un niño de Guisa, Granma. Un bebé que apenas comienza a vivir; los médicos no se explican qué tipo de enfermedad es esta que ataca los pulmones tan rápido, y tampoco se explican cómo ha aumentado el dengue y varios tipos de (SARS) en este año”, comenzó diciendo.
Toledo manifestó su respeto a los médicos cubanos, asegurando que no es responsabilidad de ellos el hecho de no tener los medicamentos necesarios, así como tampoco que la “potencia médica” de la que tanto presume el régimen, no tenga ni para los insumos más básicos.
“Mis respetos para los médicos cubanos ante todo. No es su culpa que no tengan los medicamentos apropiados. No es su culpa que en la potencia médica no tengamos tan siquiera ni una gasa para operar, un hilo para agarrar puntos o una pastilla para un dolor”.
“No es su culpa las cuatro y seis horas de apagones y los mosquitos propagando estas enfermedades. No es su culpa que no se les dé un mejor salario ni que todos cuenten con un transporte para ir a salvar una vida, una vida que se puede perder por minutos llegando tarde”, aseveró.
Por supuesto, este hombre oriundo de Granma no olvidó que la dictadura prefiere despilfarrar el dinero en hoteles y carros de turismo – con el objetivo de atraer las divisas de los viajeros – en lugar de invertir en hospitales, ambulancias o medicamentos.
“No es su culpa que el sistema invierta en hoteles y carros TUR, y no tener los cojon*s para comprar ambulancias, aunque sean chinas y una por provincia”.
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Finalmente, refiriéndose a los médicos, catalogó a unos como “valientes” y otros como “despreocupados”, preguntándose al mismo tiempo el cómo hacen estos galenos para ver a un bebé en sus últimos momentos de vida.
“¿No sé como sacan fuerzas ustedes como médicos para mirar a un niño a punto de morir sabiendo que con condiciones y medicinas se podía salvar? ¡Ustedes son unos valientes, y otros, unos despreocupados!”, concluyó.
Redacción de Cubanos por el Mundo
