Una nueva tragedia se suscitó recientemente en la isla, luego de que un cubano perdiera la vida tras caer del techo de un central en Ranchuelo, en la provincia de Villa Clara.
Según informó La Proa del Centro en sus redes sociales, la víctima respondía al nombre de Osvaldo Herrera, quien residía en Pastora y estaba localizado a unos 10 metros de altura antes de precipitarse.
“Acaba de matarse un hombre después de caerse del techo del Central Efraín Alfonso, próximo al municipio de Ranchuelo, Villa Clara. La víctima, llamado Osvaldo Herrera, vivía en Pastora y se encontraba a 10 metros de altura momentos antes del trágico accidente”, escribió el medio citado.
El medio citado compartió las palabras del hermano de la víctima, identificado como Yoel Delgado, quien denunció que el fallecido no contaba con la protección necesaria para subir a tal altura.
“Por el comentario del hermano, al parecer no contaba con ningún tipo de protección ni seguridad para realizar ese trabajo. Si era un empleado del central, la entidad debía de haber dispuesto todos los medios necesarios para asegurar la vida de este hombre. Pero desgraciadamente el estado cubano no valora la vida de nadie”.
Casos como estos no solamente ocurren en Villa Clara, sino también en todo el país, cuyas empresas estatales hacen la vista gorda cuando sus trabajadores sufren las consecuencias de la propia negligencia de las autoridades.
Muchos de esos empleados han perdido trágicamente la vida, tal y como sucedió con Osvaldo, y aun así, los entes correspondientes no asumen la responsabilidad de la tragedia, justo lo mismo que ocurre en cada sector tocado por el régimen castrista en toda la mayor de las Antillas.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
