En Cuba, escasea algo tan esencial como el agua y lo único que abunda son la miseria y las enfermedades, y la provincia de Granma no es la excepción.
Una cubana residente del municipio Jiguaní, contó al periodista Alberto Arego que los pobladores de la localidad sufren la falta del líquido y, para colmo, debido a que no les queda de otra que ingerir “cualquier cosa”, están padeciendo enfermedades estomacales como la diarrea.
Trascendió que el presunto motivo por el cual no llega a esa zona es por una turbina rota, situación que lleva más de un mes y, como de costumbre, ninguna autoridad de la provincia mueve un solo dedo para ayudar al pueblo.
“Le escribo a usted para que haga público lo que está ocurriendo en un pueblito que está ubicado en la provincia Granma y es Las minas de Charco Redondo, Jiguaní. Están presentando problemas con el agua. Tienen la turbina rota hace más de un mes. Yo no vivo ahí, pero tengo mi hermana, tíos, primos, en fin”, dijo la denunciante, que prefirió mantener el anonimato.
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Asimismo, recalcó que todos sus familiares que residen en el sitio están presentando un cuadro de diarrea que podría poner en peligro su salud.
Situaciones como estas no hacen más que seguir dejando en evidencia que al régimen no le interesa en lo absoluto el bienestar de los habitantes, al mismo tiempo que pregonan ese falso “amor al pueblo”.
Mientras tanto, son esos cubanos de a pie los que deben arreglárselas todos los días de su vida para sobrevivir en medio del caos, la miseria, las enfermedades y la desesperanza, lidiando con falta de medicamentos, alimentos, agua, y pare de contar.
Redacción de Cubanos por el Mundo
