Yenisley Perdomo, joven cubana de 37 años que tenía cáncer de mama con metástasis ósea y hepática, falleció recientemente luego de obtener una visa humanitaria para tratarse fuera de la “potencia médica”.
Como se recordará, su madre, Gina Sao, denunció en su cuenta de Facebook hace pocos que en Cuba no le daban ningún tratamiento y que su salud se deterioraba día a día.
“Por favor, ayúdenme. Esta dictadura asesina me está matando a mi hija. Ella está enferma de cáncer y no recibe ningún tratamiento. Necesita una visa humanitaria urgente”, dijo en su momento.
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Lamentablemente, la joven cubana no pudo resistir más y perdió la vida en la provincia de La Habana, informó la activista Diasniurka Salcedo Verdecia.
Salcedo precisó que el viaje de Yenisley se complicó por problemas de “papeleo”, y justo cuando estaba a punto de despegar finalmente, su salud se deterioró drásticamente.
“Hace pocos días recibí la noticia que había sido aprobada esta visa humanitaria. Por cuestiones de papeleo, el proceso se retardó y desgraciadamente cuando estaba a punto de volar no fue posible, porque falleció, dejando una niña huérfana, una madre y familia rota, en la que me incluyo”, lamentó la activista.
En agosto, la madre de la víctima ya había dicho que en mayo, a su hija le hicieron un TAC y los resultados se perdieron en el hospital. Tuvieron que esperar tres meses para otra cita, pero los equipos del hospital oncológico estaban rotos.
De esta manera, mientras el régimen sigue presumiendo a su mal llamada “potencia médica”, los habitantes de Cuba siguen muriendo debido al pésimo sistema de salud que impera en el territorio, una situación que se vuelve cada vez más desesperante y que parece no tener fin.
Redacción de Cubanos por el Mundo
