La provincia de Las Tunas – al igual que el resto de la isla – ha experimentado un aumento alarmante de la delincuencia en los últimos dos años, especialmente de los robos con fuerza y asaltos, que ponen en vilo a la población.
Según la información de la prensa castrista en esa provincia, las estadísticas muestran que en 2022 el número de delitos registrados en Las Tunas fue superior en un 36% a los del año previo.
Pero como normalmente en Cuba todo suele empeorar, la situación se ha agravado aún más en 2023, cuando en un solo semestre se registraron en un 44 % más de delitos que en la primera mitad del año anterior.

La gran mayoría de los hechos delictivos (88%) correspondieron a hurtos o robos con fuerza. También se destaca el hurto y sacrificio de ganado, que creció entre el 65 y 71% en los seis primeros meses del año, y los robos en las bodegas, donde se almacenan los productos de la canasta básica familiar normada.
En tal sentido, las autoridades de Las Tunas manifestaron elaborar una “estrategia” para poner un alto a la delincuencia, pero como todo el mundo sabe, una cosa es lo que dicen y otra la que terminan haciendo.
Entretanto, los cabecillas del régimen en la región tunera reconocieron que, al menos el 90% de las entidades fiscalizadas, no contaban con un sistema de chequeo para garantizar la seguridad de los bienes y materiales almacenados en los diferentes establecimientos, dando pie a los delincuentes para cometer sus fechorías.
Uno de los últimos casos de delincuencia en Las Tunas fue reportado recientemente, cuando antisociales ingresaron a la casa de la actriz Verónica Hinojosa para cometer un robo de más de 6,000 dólares.
PUEDE INTERESAR: Roban en casa de querida actriz de Las Tunas objetos valorados en más de 6 mil dólares
Redacción de Cubanos por el Mundo