La madre cubana, Amelia Calzadilla, quien este año abandonó la isla comunista, envió un mensaje donde reflexiona sobre lo que significa para ella la Navidad fuera de su país y lo que espera de cara al futuro.
El mensaje fue compartido a través de sus redes sociales, donde aprovechó para agradecer la oportunidad de poder estar con varios de sus seres queridos, especialmente luego de haber pasado momentos difíciles en su propia tierra.
“En un recuento de este año, agradezco la oportunidad que tiene mi familia de salir de esa enorme prisión colectiva que es la ‘bella Cuba”, escribió Calzadilla.
Asimismo, la madre cubana dijo que no se siente de humor para celebrar, ya que su país vive sus peores tiempos y su pueblo sufre la separación de familias, la miseria, el hambre, la represión y el asedio.
“Más bien siento mucho repudio de que mientras otros seres en otros lares están al lado de sus familiares disfrutando toda gama de ‘privilegios’, mi pueblo sufra la constante separación de familias, la más absoluta miseria, el hambre, la falta de aspiraciones y sueños, la cárcel para sus hijos honestos y el asedio sobre otros igualmente valiosos (sólo por decir lo que piensan y estar en lo cierto)”, afirmó.
Amelia Calzadilla también compartió su dolor por no estar junto a su madre y por la situación de otras personas que, hoy en día, deben lidiar con la crueldad de una dictadura que cada vez se hace más violenta, con quienes menos lo merecen.
“Siento mucho no estar al lado de quienes tanto quiero como mi madre, y que personas como Ailex Marcano Fabelo tenga a su hijo tan cerca y tan lejos a la vez, y sienta tanta angustia por saberlo en peligro”, agregó.
Vale la pena recordar que esta madre cubana se mudó a España a principios de noviembre, gracias a que su esposo tiene la ciudadanía de esa nación europea.
Durante más de un año, Calzadilla sufrió el hostigamiento del aparato represor del régimen castrista, que la presionó para que dejara de dar su opinión sobre la cruda realidad en las redes sociales.
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En tal sentido, la mujer hizo saber sobre la esperanza que alberga de que esta sea la última Navidad oscura en la isla.
“Reconozco que me queda mucho por aprender, pero de momento me da gusto decir que he aprendido que ese gobierno tiránico y dictatorial que rige en Cuba tiene que ser sustituido por un estado democrático y justo donde se haga culto a la dignidad plena del hombre”.
“Que sea esta la última Navidad donde como parte de la política estatal se celebre la Revolución y se comience a celebrar un feliz fin de año y un próspero año nuevo. En nuestras manos está conseguirlo”, concluyó.
Como Amelia Calzadilla, son muchas las personas que se ven obligadas a pasar estas fechas especiales lejos del seno de su familia. Mientras tanto, el régimen castrista sigue empeñándose en hacer más miserable al pueblo conforme pasan los días.
Redacción de Cubanos por el Mundo
