La Guardia Costera de Estados Unidos repatrió a 45 balseros cubanos que intentaban llegar ilegalmente a ese país, en medio de su desesperación por la insoportable miseria que azota con más fuerza en la isla comunista.
Según la información ofrecida por las autoridades a la prensa local, estos balseros cubanos estaban a bordo de una embarcación a unas 40 millas al sureste de Islamorada, una localidad del archipiélago de los Cayos de Florida.
Dicha detención ocurrió el pasado 11 de diciembre, cuando una tripulación del guardacostas Charles David Jr. interceptó a los antillanos, que fueron trasladados a bordo del buque donde recibieron comida, agua, refugio y atención médica básica.
El teniente comandante John W. Beal, oficial de asuntos públicos del Distrito Siete de la Guardia Costera, declaró que “la Guardia Costera y nuestros socios del Equipo de Trabajo de Seguridad Nacional del Sudeste continuarán patrullando los pasajes del Estrecho de Florida, Windward y Mona durante la temporada navideña para disuadir e interceptar los intentos de migración marítima ilegal”.
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Asimismo, advirtió que “cualquier persona que intente inmigrar ilegalmente a los Estados Unidos por mar será repatriada a su país de origen o de partida. No te lances al mar; utilizar vías seguras y legales”.
Según los datos ofrecidos por la misma agencia federal, en lo que va del año fiscal 2024, que comenzó el 1 de octubre de 2023, se han repatriado a 125 balseros cubanos, un número que representa la desesperación del pueblo por escapar, sea como sea, del hambre y la miseria.
Aunque las autoridades estadounidenses advierten una y otra vez sobre las consecuencias de ser detenidos en plena travesía marítima, las personas siguen intentando buscar esas anheladas tierras de libertad, algo que en Cuba se esfumó desde hace más de 60 años.
Redacción de Cubanos por el Mundo
