Un niño cubano que sufrió el pasado mes de diciembre graves quemaduras en su cuerpo, parece haber salido de lo peor mientras se mantiene internado en una institución médica.
Según informó recientemente la cuenta en Facebook, del Hospital Dr. Antonio Luaces Iraola, de la provincia de Ciego de Ávila, la vida del pequeño ya no corre peligro, luego de haber llegado a ese recinto con el 60% de su cuerpo presentando quemaduras.
El niño cubano, llamado Leandro Daniel Gamboa Pelegrín, de apenas ocho años, se encuentra internado desde el pasado 16 de diciembre en la sala de quemados.
En el texto – que no se desaprovecharon para alabar a la “potencia médica” – hace referencia a las largas horas que Leandro ha estado en la cama 6 de la unidad, alegando que se ha convertido “en su fiel compañera” desde entonces.
De igual forma, agrega que un “equipo multidisciplinario de profesionales” se encargó de la atención del niño, además de contar con el apoyo del Hospital Frank País de la capital cubana, que supuestamente envió la cubierta temporal de piel necesaria para proteger las partes afectadas.
“Bastaron unas horas en la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos para lograr estabilidad hemodinámica. A partir de ahí, un excelente equipo multidisciplinario de profesionales ha estado en función de su tratamiento y ha trazado con cautela cada procedimiento que se le ha realizado”, reza la publicación.
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Trascendió que la madre del lesionado también habría ofrecido su propia piel con la intención de realizarse un homoinjerto al pequeño.
Aunque todo parece indicar que ya lo peor pasó para el pequeño Leandro, los médicos aseguraron que todavía “un largo camino falta por recorrer”, pero todo va en la dirección debida.
Es importante mencionar que en la publicación no se mencionó cómo fue que el niño sufrió la quemadura de gran parte de su cuerpo.
Redacción de Cubanos por el Mundo
