Unas fotografías tomadas a lo que queda del Parque Lenin, han expuesto el desolado estado de abandono en el que se encuentra el emblemático espacio recreativo, que alguna vez fue un orgulloso símbolo de distracción y naturaleza en La Habana.
Este extenso parque, con sus 472 hectáreas, fue concebido por el renombrado arquitecto cubano Antonio Quintana Simonetti, pero hoy yace en ruinas, víctima del vandalismo y la negligencia del régimen comunista que no se ocupa de mantener espacios recreativos para los niños y las familias de la isla.
Las fotografías del Parque Lenin fueron publicadas por el medio independiente Cubanet, y se han extendido en las redes sociales, donde los cubanos han aprovechado para dejar sus mensajes de lamento por la pérdida de este espacio.
“Que triste ver el Parque Lenin todo destruido, muchos recuerdos de mi infancia… Mucha tristeza”, lamentó Tatiana Gomez en un post de Facebook.
Las críticas hacia el régimen comunista permanecen también en este aspecto, de los cubanos que exigen mejor calidad de vida para su familia.
“Eso pronto lo coge las mipymes y verán como vuelve a funcionar. Boten ese presidente no sirve para nada. Ahí que coger el ejemplo del salvador y el presidente tan bueno que tienen. Como un país tan criminal lo convirtió en miles de personas creyendo en Dios, pero cuando reniegas de Dios un presidente como Fidel, lo que viene es miseria y destrucción para todo un pueblo”, expresó en un mensaje, Kerlin Gonzalez.
“Lo que un día fue un gran parque importante para los niños de La Habana y sus alrededores, todas las personas de todas las edades disfrutaban del emblemático lugar en La Habana. Deseado y soñado por Celia Sánchez Manduley, tuve grandes años de trabajo y momentos en el Centro de Elaboración con grandes amigos y hoy ya no me encuentro con ellos, pero le deseo a todos los trabajadores de ese lugar qué mejoren cada día más. No solo los restaurantes, cafeterías y el complejo de piscinas, también tiene que haber un lugar para el disfrute de los más pequeños. Amén que logren poder recuperar lo que algún día fue”, compartió Germán Hernández en un comentario.
El desconsuelo por la decadencia del Parque Lenin refleja no solo la pérdida de un espacio físico, sino también la nostalgia por los momentos compartidos y la falta de oportunidades recreativas para las generaciones presentes y futuras de habaneros.
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Redacción Cubanos por el Mundo
