A través de las redes sociales circula una denuncia sobre el maltrato que recibieron una madre y su pequeña hija, quien está operada de gastrostomía, en un hospital de La Habana.
La internauta identificada como Leidis Pacheco, mencionó que, recientemente, su hermana, su papá y su sobrina, viajaron desde Guantánamo a la capital por temas de salud de la niña.
“Visitan el hospital en el cual fue operada la niña, para ver cómo la atendían para resolver su situación o saber cómo pueden hacer los procesos de dilatación de su garganta lo más antes posible para que pueda volver a comer por su boquita”, explicó la antillana.
Durante su estancia en el centro de salud en La Habana, la madre cubana y su hija fueron muy mal atendidos por el personal de salud, pues las hicieron esperar afuera, lo que calificó Pacheco como un trato “para animales”.
No fue hasta que la directora del hospital los atendió y les informo que les iba a dar una carta de viaje para que regresaran, porque ahí no se estaban haciendo las dilataciones y que las operaciones se hacían en Guantánamo y que eso era con el cirujano que la atendió.
En tal sentido, la funcionaria aseguró que ellos no tienen nada que ver con el estado de salud de la pequeña, y de hecho, ni siquiera la examinaron, ni buscaron su historial médico, a pesar de que en ese hospital le hicieron la gastrostomía.
“Ella (su hermana) nos llamó urgente y nos dijo que fuéramos al hospital infantil de aquí para hablar con dicho cirujano, el cual nos dice que él no tiene nada que ver, que esas coordinaciones eran con el pami. Por último, hablamos con el director del hospital que nos atendió muy bien y nos aclaró que no podían resolver nada, solo ayudarnos con una llamada porque aquí no se estaba haciendo las dilataciones porque no tienen el material y que esas operaciones hace años no se hacen aquí”, añadió.
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La madre de la pequeña está desesperada tras la operación de gastrostomía, pues no la han remitido a un lugar en el que puedan hacerle las dilataciones que tanto necesita.
“Mi niña necesita salir de esta situación, (…) no puede ser que en nuestro país no allá nada y que los hospitales no tengan los recursos para estos tipos de caso. Hoy es ella, pero ni que Dios lo quiera puede ser otra persona. Le escribe una tía desesperada que ya no sabe qué hacer. Oren mucho por mi niña”, finalizó.
Redacción de Cubanos por el Mundo
