Una nueva denuncia de negligencia y de la impotencia médica cubana circula en las redes sociales, con una fotografía en la que se ve cómo atienden a un niño en una clínica dental a la intemperie.
A juzgar por la imagen, se trata de una jornada médica que trasladaron hasta una escuela, en la que no se tomó en cuenta la importancia de la higiene, pues instalaron una arcaica silla de estomatología debajo de un techo, al aire libre, lo cual expone a los pacientes a riesgo de contraer infecciones.
Una clínica dental debe cumplir los estrictos protocolos de higiene para garantizar la salud, tanto de pacientes como de los profesionales, en dos apartados fundamentales: las personas y el instrumental, puesto que, el objetivo es que la clínica sea un entorno seguro y libre de contagios.
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Esta es una muestra de que la “potencia médica cubana”, además de negligente, no cuenta con un personal que le importe proteger la salud de los pobladores.
Las críticas en las redes sociales no se hicieron esperar, pues muchas personas resaltaron que estos son los logros de la fracasada revolución, donde el sistema de salud es cada vez más precario.
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Aunque la atención en espacios abiertos representa la exposición a infecciones, probablemente es un lugar más seguro que la asistencia en clínicas estomatológicas, puesto a que los médicos no cuentan con el instrumental correcto ni higienizado, tal como se denunció hace unos meses.
El cubano Rolando Castellanos, se dio la tarea de mostrar al mundo entero, a través de las redes sociales, las deterioradas condiciones en las que se encuentra la clínica estomatológica de La Habana.
Redacción de Cubanos por el Mundo
