Los balseros cubanos rescatados hace pocos días en México, y que en su momento fueron identificados como Yurieski Romero Hernandez, Mario Sergio Márquez Ventura, Rogelio Loaces Fuentes y Diosan Lazo Loaces, finalmente recibieron una tarjeta de residencia por razones humanitarias.
Cabe resaltar que este importante documento les permitirá no solo trabajar legalmente en el país, sino también abrir una cuenta bancaria, marcando el inicio de una nueva vida lejos de la miseria impuesta por el castrismo en la isla.
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Después de una ardua travesía de 34 días en alta mar, enfrentando inclemencias del tiempo en una improvisada balsa de madera y latas de zinc, encontraron refugio en la Casa del Migrante de Matamoros, Tamaulipas.
El Instituto Nacional de Migración les está otorgando la regularización por situación humanitaria.https://t.co/FevMavSRBV
— Milenio Tamaulipas (@MilenioTam) May 9, 2024
Seguismundo Doguin Martínez, encargado de la agencia de Migración en el estado, compartió que, por el momento, los cubanos tienen restringido el viaje, pero se les está brindando apoyo para que puedan conseguir empleo y, eventualmente, una vivienda donde iniciar su nueva vida en México.
Tras ser rescatados y pasar un tiempo recuperándose de la desnutrición y deshidratación en el Hospital General de San Fernando, los balseros cubanos nunca dejaron de persistir en su objetivo: huir de la dictadura.
Una fuente del hospital reveló a 14ymedio que, incluso en medio de su recuperación, expresaron su deseo de trabajar para eventualmente poder traer a sus familias a la nación azteca.
Asimismo, el medio citado menciona que José Luis Pérez, abogado defensor de migrantes, explicó que este tipo de tarjeta se otorga precisamente en situaciones de vulnerabilidad, asegurando que, más allá de la residencia, estos individuos ahora tendrán acceso a servicios de salud y programas de asistencia social.
A medida que transcurre el tiempo, son más los balseros cubanos que buscan desesperadamente un mejor futuro, y no solo para ellos, sino también para los seres queridos que quedan de rehenes en la mayor de las Antillas.
Redacción de Cubanos por el Mundo
