El castrismo ha prohibido que el sacerdote cubano Alberto Reyes, haga sonar las campanas de su iglesia, lo cual hacía como protesta en cada apagón.
Tras dos noches consecutivas de hacer esta manifestación pacífica, el párroco de Esmeralda, el religioso recibió la notificación de prohibición por parte del arzobispo de Camagüey, Mons. Wilfredo Pino Estévez.
“Después de dos noches consecutivas, en las que el P. Alberto Reyes ha tocado las campanas de la Iglesia de Esmeralda, durante el apagón, como prometió en la última entrega de su columna “He estado pensando”; le ha sido prohibido, por parte del arzobispo de Camagüey, Mons. Wilfredo Pino Estévez continuar haciéndolo. Detras de está prohibición, sin dudas, está la responsabilidad de la represora Caridad Diego Bello y su Oficina de Asuntos Religiosos al servicio del PCC”, informó Osvaldo Gallardo González.
El sacerdote previamente había informado que haría sona 30 veces las campanas durante los apagones, como un modo de alzar su voz en contra del régimen, no solo por los cortes eléctricos, sino también por el hambre, la miseria y la escasez en la isla.
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“A partir de ahora, cada noche que no tengamos electricidad, sonaré 30 veces las campanas de la iglesia, con el toque lento de los cortejos fúnebres, con el toque que anuncia muerte y luto: la muerte agónica de nuestra libertad y de nuestros derechos, la asfixia y el hundimiento de nuestra vida”, escribió el sacerdote cubano, quien además mencionó que esto lo hace con el propósito de levantar una voz perdida “en medio de la oscuridad interminable, pero será un modo de llamar al alba necesaria sobre nuestra tierra hundida en la noche”, indicó Reyes en sus redes sociales.
Redacción de Cubanos por el Mundo
