El reconocido cantante español Alejandro Sanz dejó una huella imborrable en Madrid con su reciente concierto, que describió como uno de esos momentos que permanecen eternamente en la memoria.
“Hay conciertos que duran días, años y siglos en la memoria del corazón. Ayer fue uno de esos conciertos. Sigo allí y nunca me voy a ir. GRACIAS mi Madrid”, escribió Sanz en su cuenta de Facebook, donde también compartió fotografías de esta noche.
En el evento, en el Bernabéu en la gran noche de Telefónica, Alejandro Sanz dominó el escenario y emocionó al público con la presencia especial de David Summers y Niña Pastori.
El artista no dejó de interactuar con su audiencia, compartiendo anécdotas, saludos y recuerdos con los asistentes.
A lo largo del concierto, Sanz mostró su maestría musical, dirigiendo a su orquesta con precisión, su equipo de músicos de primer nivel lo acompañan en sus giras mundiales.
Su conexión con el público es palpable, y aunque en algún momento se le cayó el micrófono, una sonrisa y la rápida ayuda del guitarrista Mike Ciro bastaron para mantener la magia del espectáculo.
El poder de convocatoria de Alejandro Sanz quedó claro con la asistencia de varias generaciones de fans que cantaron cada una de sus letras.
El momento culminante fue la aparición de Niña Pastori, quien se unió a Sanz para interpretar “Mi soledad y yo”, sorprendiendo gratamente a todos los presentes y cerrando la noche con broche de oro.
Alejandro Sanz ha sido considerado como uno de los grandes de la música, y en esa posición lo mantiene su público, en esta oportunidad el de Madrid que continúa apoyándolo y destacando su talento y gran profesionalismo.
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Redacción Cubanos por el Mundo
