Una familia cubana está indignada por la leve condena que le dieron a un hombre que fue el depredador sexual de una niña de cuatro años.
El Tribunal Municipal de Buey Arriba, en la provincia Granma, emitió una sentencia de tres años de correccional sin internamiento por el delito de abuso sexual de carácter continuado, contra un hombre que se aprovechó de la inocencia de una pequeña.
“¡Creo que esa sentencia fue tan vergonzosa! Aquí en Cuba un delincuente mata a una vaca y son de 8 a 9 años de prisión. Entonces un delincuente que abusa de una niña le ponen 3 años de trabajo correccional sin internamiento”, sentenció Yelenis Pinilla, la abuela de la pequeña.
Los familiares de la pequeña aseguran que esto es un acto de corrupción de por parte de los jueves y fiscales de la isla.
Vale resaltar que la leve condena también se debe a que el depredador sexual es un agente de la Seguridad del Estado cubano. “Este pueblo es chiquito, y como dicen ‘pueblo chiquito, infierno grande’ y se sabe que el criminal es un agente”, insistió la abuela.
El fallo de los jueces Rutmary Moreno Carrazana, Yenima Suarez Millán y Luis Leyva Rivero, con fecha del 20 de febrero de 2024, dio por consumado que, hace aproximadamente un año, la víctima A. M. Contino Pinilla se personó, sin vigilancia de ningún familiar adulto, en la vivienda del agresor Maikel Solano Arévalo, por lo que el sujeto aprovechó para llevar la niña a una habitación, despojarla de sus ropas y satisfacer sus instintos, pero sin penetración.
La menor hizo un relato tan detallado, que fue fundamentado para declarar al sujeto como culpable.
“En cuanto a la sentencia y a la manera en que se tramitó el proceso, se evidencia que esta persona no estuvo en ningún momento privada de libertad. De hecho, la medida cautelar que le aplicaron durante todo el proceso fue una obligación contraída en acta, o sea, ir a un lugar determinado que puede ser una unidad de la policía, a firmar una vez por semana o una vez cada 15 días, etcétera”, indicó el abogado del centro de asesoramiento legal Cubalex, Alaín Espinosa, quien tuvo acceso a la sentencia.
El experto consideró que se entorpeció el debido proceso penal tratando, de alguna manera, de incidir sobre la niña o su madre y el resto de los allegados para que estos falseen su testimonio.
Vale resaltar que, la menor en ocasiones se quedaba bajo los cuidados de la esposa del depredador sexual, por lo que más de una vez cometió sus actos “libidinosos” sin poder concretarse fechas exactas. La denuncia la formuló la madre de la menor, Irianis Contino Pinilla.
Espinoza explicó que, ante un crimen como este, es importante imponer una sanción de más de cinco años de privación de libertad, o de lo contrario, va a continuar la tendencia de cierto grado de impunidad al responsable de un delito tan grave como este y que le da la posibilidad de que vuelva a cometer delitos de este tipo.
La sentencia reseña que el agresor sexual “con anterioridad a los hechos mantenía una normal conducta social y moral, se encuentra integrado a las organizaciones de masas y políticas de la comunidad, participa en las actividades que convocan, y hasta la fecha no le constan antecedentes penales”.
El abogado afirmó que la sanción impuesta a Solano Arévalo se puede interpretar como que el sistema de justicia fue benevolente, incluso dentro del proceso penal, porque en todo momento mantuvieron en libertad a la persona; lo cual demuestra que la voluntad política del Estado está más inclinada a la criminalización.
La familia apeló la sentencia, pero esperan la resolución desde hace más de 20 días.
Redacción de Cubanos por el Mundo
