La comunidad diplomática en Cuba se ha visto sacudida por un incidente grave que involucra a Enrico Nerongo, hijo del Embajador de Namibia, Samuel Hendrik Goagoseb, quien es acusado de golpear brutalmente a su novia cubana, Mariela Ruiz Bourzac.
Este incidente, ocurrido el pasado domingo en La Habana, ha suscitado una oleada de indignación y preocupación, no solo por la severidad del ataque, sino también por el tratamiento legal del mismo debido a la inmunidad diplomática de Nerongo.
Según los informes, Mariela, que está embarazada de cuatro meses, fue golpeada severamente por Enrico, resultando en lesiones graves, incluida una nariz rota. A pesar de los esfuerzos de la familia de Mariela por buscar justicia, se encontraron con un obstáculo significativo: la policía les informó que no podían proceder con la denuncia debido a la inmunidad diplomática del agresor.
El caso ha generado un debate sobre la inmunidad diplomática y su impacto en la justicia local.
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Numerosos activistas cubanos han expresado su indignación en las redes, mientras que el impacto de la noticia entre los medios de Namibia es nulo.
A pesar de eso, el ruido llegó a “los interesados”.
Una fuente del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) reveló ayer que el asunto se analizó a puertas cerradas dentro del edificio debido a la delicadeza y la complejidad del caso. La misma fuente se puso en contacto con Cubanos por el Mundo para señalarnos que “había llegado a oídos de ellos” que el joven había llamado o visitado – imposible de precisar – a la joven abusada, para cuestionarle de qué manera la información había llegado a los medios independientes cubanos y a las redes sociales.
La misma fuente reveló que el Embajador está haciendo gestiones para mitigar el asunto y que entre las medidas que quería tomar era sacar cuanto antes a su hijo de Cuba, para que “se desapareciera unos meses, a esperar que la cosa se calmara”, y en ese sentido estuvo haciendo gestiones interesado en la posibilidad de hacerlo sin quebrar ninguna ley.
La propia fuente indicó que, debido a que no existe denuncia sobre el caso, Enrico Nerongo no debería tener ninguna limitación para irse del país, pero no pudo precisar la fuente si el asunto está “en otras manos” y que exista una limitante que escapa a su conocimiento y el del Embajador.
En cualquier caso, explicó la fuente, el Embajador tiene conexiones importantes dentro del gobierno cubano, incluido el presidente Díaz-Canel, lo que complica aún más la situación.
