Bryan Roger Bishop, un residente de Cayo Maratón, Florida, fue condenado a 45 meses de prisión por agredir a agentes policiales durante el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
Además de su sentencia, Bishop deberá cumplir 36 meses bajo libertad supervisada y pagar $2,000 en restitución.
Bishop fue identificado a través de fotos en las que se le ve utilizando un irritante químico contra oficiales. Fue arrestado en agosto de 2023, junto a su esposa, Tonya Bishop, quien también participó en los disturbios y se declaró culpable, aunque enfrentó cargos menores por alteración del orden público. Ambos fueron identificados a través de fotos compartidas por el FBI, según indicó el Departamento de Justicia de los EE.UU. en un comunicado.
Bryan Roger Bishop, de 52 años, se declaró culpable de agredir a agentes de la policía con un químico irritante durante el ataque. Según los fiscales, fue captado en imágenes rociando a un oficial de policía en el rostro y luego a otro bajo su escudo facial.
El incidente ocurrió en medio de los disturbios cuando los partidarios de Donald Trump intentaban revertir los resultados de las elecciones presidenciales de 2020.
Después de la agresión, Bishop ingresó al Capitolio y permaneció allí por 17 minutos antes de salir.
Aunque pudo haber enfrentado hasta ocho años de prisión, su sentencia fue menor tras llegar a un acuerdo de culpabilidad con la fiscalía.
Otros casos de la Florida
El caso de Bishop no es el único en Florida relacionado con los disturbios del 6 de enero.
Otro ejemplo destacado es Enrique Tarrio, exlíder de los Proud Boys, quien recibió una condena de 22 años, la más larga hasta ahora para un participante en el asalto al Capitolio.
Tarrio, originario de Miami, no estuvo físicamente presente en el Capitolio durante el ataque, ya que fue arrestado dos días antes por quemar una bandera de Black Lives Matter. Sin embargo, fue condenado por conspirar y organizar la insurrección, dirigiendo a los Proud Boys desde la distancia para evitar la transferencia pacífica de poder tras las elecciones presidenciales de 2020.
Los fiscales presentaron pruebas que incluían mensajes en los que Tarrio se atribuía el éxito del ataque, diciendo a sus seguidores: “Nosotros hicimos esto”.
Estos casos forman parte de una amplia investigación en la que más de 1,500 personas han sido acusadas en relación con el ataque al Capitolio.
Las sentencias ejemplares, como las de Bishop y Tarrio, subrayan la determinación de las autoridades de responsabilizar a los responsables de uno de los episodios más oscuros de la democracia estadounidense.
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